Dificultad para respirar o disnea

Aprobado por la Junta Editorial de Cancer.Net, 02/2018

La disnea es una sensación de falta de aire. Muchas personas con cáncer avanzado pueden experimentarla. Las personas que tienen cáncer en estadios iniciales y tienen otras afecciones que afectan al corazón o los pulmones, como un coágulo sanguíneo, también pueden experimentar disnea.

Los síntomas frecuentes de disnea incluyen:

  • Incomodidad al respirar

  • Dificultad para respirar

  • Incapacidad para obtener la cantidad de aire suficiente

  • Sensación de asfixia, opresión, ahogo o sofocación

Cómo descubrir la causa de la dificultad para respirar

Una persona puede experimentar disnea a pesar de que los niveles de oxígeno reales estén dentro del rango normal. Es importante comprender que las personas no se sofocan ni mueren a causa de la disnea. Pero infórmele de inmediato al equipo de atención médica si experimenta alguno de estos síntomas o si estos empeoran. El alivio de los efectos secundarios es un aspecto importante de la atención y el tratamiento contra el cáncer. Esto se denomina cuidados paliativos o atención de apoyo.

Para obtener más información sobre sus síntomas, el equipo de atención médica hará lo siguiente:

  • Revisará sus antecedentes médicos.

  • Le pedirá que describa sus síntomas y qué los hace empeorar.

  • Le pedirá que califique los síntomas en una escala.

Causas de la dificultad para respirar

La causa de la disnea puede ser un tumor u otra afección relacionada con el cáncer. Pero muchas de estas causas se pueden tratar. Algunas causas frecuentes de disnea incluyen:

Tratamiento de la dificultad para respirar

Un paso importante para manejar la disnea es tratar la causa, como el tumor o un coágulo sanguíneo. El médico también puede recomendarle lo siguiente para ayudar a aliviar los síntomas:

  • Recibir oxígeno extra

  • Sentarse frente a un ventilador

  • Respirar aire más fresco al bajar la temperatura en una habitación

  • Respirar aire más puro al abrir una ventana, usar un humidificador o quitar el humo y la caspa de las mascotas

  • Tener la sensación de espacio abierto al ver un paisaje exterior, abrir las ventanas o estar en una sala vacía

  • Mantener su cabeza levantada, por ejemplo, con el uso de almohadas para que esté una posición casi sentado

  • Practicar técnicas que desvíen su atención del problema, como relajación y meditación

  • Tomar medicamentos analgésicos, como la morfina, que ayudan a controlar el sistema nervioso central

  • Tomar ansiolíticos para controlar el dolor y la ansiedad

  • Realizar ejercicios de fuerza y acondicionamiento, fisioterapia o rehabilitación pulmonar

Recursos relacionados

Cuándo llamar al médico durante el tratamiento del cáncer (en inglés)

Efectos secundarios