Linfoma no Hodgkin: Signos y síntomas

Aprobado por la Junta Editorial de Cancer.Net, 03/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará más información sobre los cambios en el cuerpo y otras cosas que pueden indicar un problema que puede requerir atención médica. Use el menú para ver otras páginas.

Las personas con LNH pueden experimentar una variedad de síntomas o signos. Un síntoma es algo que solo la persona que lo experimenta puede identificar y describir, como fatiga, náuseas o dolor. Un signo es algo que otras personas pueden identificar y medir, como fiebre, erupción cutánea o pulso elevado. Juntos, los signos y los síntomas pueden ayudar a describir un problema médico. No obstante, muchas personas, especialmente aquellas con linfoma folicular, linfoma linfocítico pequeño, linfoma de la zona marginal y subtipos indolentes, no presentarán ningún síntoma o signo. Y afecciones distintas del linfoma también pueden causar muchos de los síntomas y signos de LNH.

Hay muy pocos cambios, o síntomas, que son específicos del linfoma. Esto explica por qué a veces es difícil obtener un diagnóstico. Los síntomas del LNH dependen de dónde se origina el cáncer y del órgano afectado.

Síntomas generales:

  • Ganglios linfáticos agrandados en el abdomen, la ingle, el cuello o las axilas

  • Hígado o bazo agrandados

  • Fiebre no relacionada con una infección u otra enfermedad

  • Pérdida de peso sin causa conocida

  • Sudoración y escalofríos

  • Fatiga

Ejemplos de síntomas relacionados con una ubicación específica del tumor:

  • Un tumor en el abdomen puede causar distensión abdominal o dolor de espalda o de abdomen.

  • Tener el bazo agrandado puede provocar dolor de espalda y sensación de estómago lleno.

  • Un tumor en la ingle puede causar hinchazón en las piernas.

  • Un tumor en las axilas puede causar hinchazón en los brazos.

  • Si el linfoma se disemina al cerebro, pueden aparecer síntomas similares a los de un accidente cerebrovascular.

  • Un tumor en el centro del tórax puede ejercer presión sobre la tráquea y causar tos, dolor en el pecho, dificultad para respirar u otros problemas respiratorios.

Si le preocupa algún cambio que ha experimentado, hable con su médico. Su médico le preguntará desde cuándo y con qué frecuencia ha tenido los síntomas, entre otras preguntas. Esto es para ayudar a detectar la causa del problema, lo que se denomina diagnóstico.

Si se diagnostica LNH, su médico puede también usar ciertos síntomas para ayudar a describir la enfermedad. Esto se denomina estadificación. Durante muchas décadas, los médicos dividieron cada estadio del LNH en las categorías “A” y “B” según los síntomas específicos, tal como se menciona más abajo. Sin embargo, el último sistema de determinación de estadios publicado en 2014, conocido como la clasificación de Lugano, eliminó tales categorías porque no afectan necesariamente el tratamiento.

  • A significa que una persona no ha tenido síntomas B.

  • B significa que una persona experimentó los siguientes síntomas:

    • Pérdida de peso sin razón aparente de más del 10% del peso corporal original durante los 6 meses anteriores al diagnóstico.

    • Fiebre sin razón aparente, con temperaturas superiores a 38 °C (100.4 °F).

    • Sudores nocturnos que empapan. La mayoría de los pacientes informa que su ropa de dormir o las sábanas terminan literalmente empapadas. En ocasiones, se producen sudoraciones importantes durante el día.

Una vez que un médico diagnostica y determina el estadio del LNH, el alivio de los síntomas sigue siendo un aspecto importante de la atención y del tratamiento del cáncer. Esto también puede denominarse manejo de los síntomas, cuidados paliativos o atención de apoyo. Asegúrese de hablar con su equipo de atención médica sobre los síntomas que experimenta, incluido cualquier síntoma nuevo o cambio en los síntomas.

La siguiente sección de esta guía es Diagnóstico. Explica qué pruebas pueden ser necesarias para obtener más información sobre la causa de los síntomas. Puede usar el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.