View All Pages

Tumor cerebral - Introducción

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará algo de información básica sobre esta enfermedad y las partes del cuerpo que puede afectar. Esta es la primera página de la Guía para los tumores cerebrales de Cancer.Net. Use el menú para ver otras páginas. Piense en ese menú como un mapa para recorrer la guía completa.

La posibilidad de que se diagnostique un tumor cerebral es un evento impactante y que puede cambiar su vida. Si su médico sospecha que tiene un tumor cerebral, es importante buscar a otros médicos especializados en el diagnóstico y en el tratamiento de tumores cerebrales. El cerebro es un órgano complejo y vital, y el tratamiento a menudo causa cambios para toda la vida. Es importante buscar opiniones de especialistas e información médica actualizada sobre las opciones de tratamiento para el tipo específico de tumor cerebral.

Información sobre el cerebro y el sistema nervioso central

El cerebro y la columna vertebral constituyen el sistema nervioso central (SNC), donde se controlan todas las funciones vitales. Estas funciones incluyen el pensamiento, el habla y los movimientos corporales. Esto significa que cuando un tumor crece en el SNC puede afectar los procesos de pensamiento de una persona o la forma en que habla o se mueve.

Anatomía del cerebro

El cerebro está compuesto por 3 partes principales: el encéfalo, el cerebelo y el tronco encefálico. Las meninges, que rodean el cerebro, también se consideran parte del cerebro.

  • El encéfalo. Esta es la parte más grande del cerebro. Tiene 2 hemisferios cerebrales de cada lado del cerebro y cada uno controla el lado opuesto del cuerpo. Se divide en 4 lóbulos en los que se producen funciones específicas:

    • El lóbulo frontal controla el razonamiento, las emociones, la resolución de problemas, el habla expresiva y el movimiento

    • El lóbulo parietal controla las sensaciones del tacto, como la presión, el dolor y la temperatura. También controla partes del habla, la orientación visual-espacial y el cálculo.

    • El lóbulo temporal controla la memoria, los sentidos especiales, como la audición y la capacidad de comprender palabras habladas o escritas

    • El lóbulo occipital controla la visión

  • El cerebelo. El cerebelo se encuentra en la parte posterior del cerebro por debajo del encéfalo. Es responsable de la coordinación y el equilibrio y de controlar las funciones en el mismo lado del cuerpo.

  • El tronco encefálico. Esta es la parte del cerebro que se conecta a la médula espinal y al cerebelo. Controla las funciones involuntarias esenciales para la vida, como los latidos del corazón y la respiración. Los mensajes para las funciones controladas por el encéfalo y el cerebelo viajan a través del tronco encefálico hasta el cuerpo.

  • Las meninges. Son las membranas que rodean y protegen el cerebro y la médula espinal. Hay 3 capas meníngeas, que se denominan duramadre, aracnoides y piamadre. El líquido cefalorraquídeo (LCR) se genera cerca del centro del cerebro en los ventrículos laterales. El LCR circula alrededor del cerebro y la médula espinal entre las capas aracnoides y pía.

Ver ilustraciones de la anatomía del cerebro.

Información sobre los tumores cerebrales primarios

Un tumor cerebral primario es un tumor que se inicia en el cerebro. Un tumor cerebral primario suele describirse como de “bajo grado” o “alto grado”. Un tumor de bajo grado por lo general crece lentamente, pero puede convertirse en un tumor de alto grado. Es más probable que el tumor de alto grado crezca más rápido.

En adultos, los tumores cerebrales secundarios, también denominados metástasis cerebrales, son mucho más frecuentes que los tumores primarios.

Información sobre los tumores cerebrales secundarios

Un tumor cerebral secundario es un tumor canceroso que comenzó en otra parte del cuerpo, como las mamas, los pulmones o el colon, y que después se diseminó al cerebro. Un tumor cerebral secundario también puede denominarse cáncer metastásico o metástasis cerebral.

Si el cáncer se extiende a las meninges y al líquido cefalorraquídeo (LCR), se lo denomina metástasis leptomeníngea o meningitis neoplásica. Esta afección se produce con más frecuencia en personas con leucemia, linfoma, melanoma, cáncer de mama o cáncer de pulmón.

El resto de esta sección cubre principalmente los tumores cerebrales primarios, al mismo tiempo que proporciona cierta información sobre las metástasis cerebrales. Para obtener más información detallada sobre el cáncer que se originó en cualquier otra parte del cuerpo y se diseminó al cerebro, lea acerca de ese tipo de cáncer específico.

Tipos de tumores cerebrales primarios

Hay muchos tipos de tumores cerebrales primarios. A algunos no se les puede asignar un tipo exacto porque la ubicación del tumor hace que sea demasiado difícil de extirpar para realizar una prueba completa.

A continuación, se enumeran las descripciones de los tipos de tumores cerebrales más frecuentes en adultos, divididos en tipos de tumores glioma y no glioma. Obtenga información sobre tumores cerebrales en niños en una guía diferente de este mismo sitio web.

Gliomas

Como grupo, los gliomas son uno de los tipos más frecuentes de tumores cerebrales. Aunque el origen exacto de los gliomas todavía se desconoce, se cree que crecen de células gliales o células precursoras gliales. Una célula glial es un tipo de célula de apoyo en el cerebro. Los principales tipos de células de apoyo en el cerebro son los astrocitos, los oligodendrocitos y las células ependimarias. Los gliomas pueden considerarse astrocitomas, oligodendrogliomas o ependimomas. A los gliomas se les asigna un grado, que es una indicación de qué tan agresivo puede ser un tumor. El grado más alto suele ser más agresivo y más propenso a crecer rápidamente. Sin embargo, la investigación actual está ayudando a los médicos a avanzar en el uso de la genética tumoral para clasificar mejor los gliomas. Esto se explica más adelante en esta guía.

Actualmente, los tipos de gliomas incluyen:

  • Astrocitoma. El astrocitoma es el tipo más frecuente de glioma. Las células astrocitomas tienen el mismo aspecto que las células gliales llamadas astrocitos que se encuentran en el encéfalo o en el cerebelo. El astrocitoma en niños es más frecuente que el astrocitoma en adultos. Hay 4 grados de astrocitoma.

    • El astrocitoma de grado I o pilocítico es un tumor de crecimiento lento que suele ser benigno y, en raras ocasiones, se disemina a tejido cercano.

    • El astrocitoma difuso de grado II o de bajo grado es un tumor de crecimiento lento que a menudo se puede diseminar a tejido cercano y puede convertirse en un grado más alto.

    • El astrocitoma de grado III o anaplásico es un tumor canceroso que puede crecer rápidamente y diseminarse a tejidos cercanos.

    • El grado IV o glioblastoma es una forma muy agresiva de astrocitoma.

  • Oligodendroglioma. El oligodendroglioma es un tumor cuyas células tienen el mismo aspecto que las células gliales llamadas oligodendrocitos. Estas células son responsables de producir mielina. La mielina rodea los nervios y es rica en proteínas y sustancias grasas llamadas lípidos. Se subclasifican como oligodendroglioma, que se considera de bajo grado u oligodendroglioma anaplásico.

  • Ependimoma. El ependimoma comienza normalmente en los conductos del cerebro donde se genera y almacena LCR. En adultos, se producen con más frecuencia en la columna vertebral y también pueden ser del subtipo mixopapilar. Obtenga información sobre el ependimoma en niños.

Tumores no glioma

Los tumores no glioma surgen de las células del cerebro que no son células gliales. Los tipos de tumores no glioma incluyen:

  • Meningioma. El meningioma es el tumor cerebral primario más frecuente. Comienza en las meninges y la mayoría de las veces no es canceroso. El meningioma puede causar síntomas graves si crece y presiona el cerebro o la médula espinal o si crece en el tejido cerebral. Obtenga más información sobre el meningioma (en inglés).

  • Tumores de la glándula pineal y la glándula pituitaria. Son tumores que comienzan en la glándula pineal y en la glándula pituitaria.

  • Linfoma primario del SNC. Esta es una forma de linfoma. El linfoma es un cáncer que comienza en el sistema linfático. El linfoma primario del SNC comienza en el cerebro y puede diseminarse al líquido cefalorraquídeo y a los ojos.

  • Meduloblastoma. Se cree que el meduloblastoma comienza a partir de un tipo específico de célula en el cerebelo. Estas células se denominan células progenitoras del gránulo cerebeloso. Es más frecuente en niños y suele ser canceroso, a menudo se extiende a lo largo del SNC. Obtenga información sobre el meduloblastoma en niños (en inglés).

  • Craneofaringioma. El craneofaringioma es un tumor benigno que comienza cerca de la glándula pituitaria situada cerca de la base del cerebro. Estos tumores son raros. Obtenga información sobre el craneofaringioma en niños (en inglés).

  • Schwannoma. El schwannoma es un tumor raro que comienza en la vaina nerviosa, o en el revestimiento de los nervios. A menudo, puede ocurrir en el nervio vestibular, que es un nervio del oído interno que ayuda a controlar el equilibrio. Normalmente, no es canceroso.

Para ver una lista completa de todos los tipos de tumores cerebrales y con qué frecuencia se diagnostican, consulte los informes del Registro central de tumores cerebrales de Estados Unidos. (Tenga en cuenta que este enlace lo lleva al sitio web en inglés de otra organización).

¿Busca información adicional a esta introducción?

Si quiere obtener información adicional a esta introducción, explore estos temas relacionados. Tenga en cuenta que estos enlaces lo llevan a otras secciones en Cancer.Net:

  • Video educativo de Cancer.Net para pacientes: vea un breve video en inglés dirigido por un experto de American Society of Clinical Oncology (Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica) sobre tumores cerebrales que brinda información básica y áreas de investigación.

La siguiente sección de esta guía es Ilustraciones médicas. Contiene imágenes de partes del cuerpo que a menudo se ven afectadas por un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Ilustraciones médicas

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará imágenes sobre las principales partes del cuerpo afectadas por los tumores cerebrales. Use el menú para ver otras páginas.

illustration of the brain

Sección transversal del cráneo y las meninges
La siguiente sección de esta guía es Estadísticas. Ayuda a explicar la cantidad de personas que reciben un diagnóstico de tumor cerebral y las tasas de supervivencia generales. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Estadísticas

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 02/2022

EN ESTA PÁGINA: encontrará información acerca de la cantidad de personas a las que se les diagnostica un tumor cerebral cada año. También leerá información general sobre la supervivencia a la enfermedad. Recuerde que las tasas de supervivencia dependen de varios factores. Use el menú para ver otras páginas.

Un tumor primario de cerebro o médula espinal es un tumor que comienza en el cerebro o en la médula espinal. Se estima que este año se diagnosticarán tumores cancerosos primarios de cerebro y médula espinal a 25,050 adultos (14,170 hombres y 10,880 mujeres) en los Estados Unidos. La probabilidad de que una persona desarrolle este tipo de tumor en su vida es inferior al 1%. Los tumores cerebrales representan entre el 85% y el 90% de todos los tumores primarios del sistema nervioso central (SNC). A nivel mundial, se estima que 308,102 personas fueron diagnosticadas con un tumor cerebral primario o un tumor de la médula espinal en 2020.

También se diagnosticará a unos 4,170 niños menores de 16 años con tumores cerebrales o del SNC este año. Obtenga más información sobre los tumores cerebrales en niños.

Además de los tumores cerebrales primarios, también hay tumores cerebrales o metástasis cerebrales secundarios. Esto ocurre cuando el tumor se inició en algún lugar del cuerpo y se disemina al cerebro. Los cánceres más frecuentes que se diseminan al cerebro son los cánceres de vejiga, mama, riñón, y pulmón, así como la leucemia, el linfoma y el melanoma. Esta guía cubre solamente los tumores cerebrales primarios en adultos.

El cáncer de cerebro y otros tipos de cáncer del sistema nervioso son la décima causa principal de muerte entre hombres y mujeres. Se calcula que 18,280 adultos en los Estados Unidos (10,710 hombres y 7,570 mujeres) morirán por tumores cancerosos primarios del cerebro y del SNC este año. Al nivel mundial, se estima que 251,329 personas murieron de tumores cerebrales primarios y tumores del SNC en 2020.

La tasa de supervivencia a 5 años indica el porcentaje de personas que sobrevive al menos 5 años una vez detectado el tumor. El término “porcentaje” significa cuántas personas de cada 100. En los Estados Unidos, la tasa de supervivencia de 5 años para las personas con un tumor canceroso del cerebro o del SNC es de casi el 36%. La tasa de supervivencia de 10 años es casi del 31%.

La edad es un factor en las tasas de supervivencia generales después de un diagnóstico de un tumor cerebral. Para las personas menores de 15 años, la tasa de supervivencia de 5 años es superior al 75%. Para las personas de 15 a 39 años, la tasa de supervivencia de 5 años es más del 72%. Para las personas de más de 40 años, la tasa de supervivencia de 5 años es casi del 21%. Sin embargo, las tasas de supervivencia varían ampliamente y dependen de varios factores, incluido el tipo de tumor cerebral o de médula espinal. Hable con su médico sobre qué esperar de su diagnóstico.

Es importante recordar que las estadísticas de las tasas de supervivencia en el caso de las personas con tumor cerebral son una estimación. La estimación se basa en los datos anuales de la cantidad de personas que tienen este tipo de tumor en los Estados Unidos. Además, los expertos calculan las estadísticas de supervivencia cada 5 años. En consecuencia, es posible que la estimación no refleje los resultados de los avances en la forma en que se diagnostica o trata un tumor cerebral en los últimos 5 años. Hable con su médico si tiene alguna pregunta sobre esta información. Obtenga más información sobre cómo interpretar las estadísticas.

Estadísticas adaptadas de la publicación de la American Cancer Society (ACS, Sociedad Americana Contra el Cáncer), Datos y cifras de cáncer de 2022, sitio web de la ACS, el CBTRUS Statistical Report: Primary Brain and Other Central Nervous System Tumors Diagnosed in the United States in 2014-2018 (Informe estadístico de CBTRUS: Tumores cerebrales primarios y otros tumores del sistema nerviosa central diagnosticados en los Estados Unidos en 2014 a 2018), el sitio web de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, y el sitio web del Instituto Nacional del Cáncer. Fuentes consultadas en enero de 2022.

La siguiente sección de esta guía es Factores de riesgo. Explica qué factores pueden aumentar la probabilidad de desarrollar un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Factores de riesgo

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará más información sobre los factores que aumentan la probabilidad de desarrollar un tumor cerebral. Use el menú para ver otras páginas.

Un factor de riesgo es cualquier factor que aumenta la probabilidad de que una persona desarrolle un tumor cerebral. Si bien los factores de riesgo a menudo influyen en el desarrollo de un tumor cerebral, la mayoría no es una causa directa de su formación. Algunas personas que tienen varios factores de riesgo nunca desarrollan un tumor cerebral, mientras que otras personas sin factores de riesgo conocidos sí lo desarrollan. Conocer los factores de riesgo y hablar con el médico al respecto puede ayudarlo a tomar decisiones más informadas. Sin embargo, en este momento no hay formas conocidas de prevenir un tumor cerebral a través de cambios en el estilo de vida.

La mayoría de las veces se desconoce la causa de un tumor cerebral, pero los siguientes factores pueden aumentar el riesgo de que una persona desarrolle un tumor cerebral:

  • Edad. Los tumores cerebrales son más frecuentes en niños y adultos de edad avanzada, aunque personas de cualquier edad pueden desarrollar un tumor cerebral.

  • Sexo. En general, los hombres tienen más probabilidades que las mujeres de desarrollar un tumor cerebral. Sin embargo, algunos tipos específicos de tumores cerebrales, como el meningioma, son más frecuentes en las mujeres.

  • Exposiciones domésticas y laborales. La exposición a disolventes, pesticidas, productos derivados del petróleo, caucho o cloruro de vinilo puede aumentar el riesgo de desarrollar un tumor cerebral. Sin embargo, todavía no hay evidencia científica que respalde este posible vínculo.

  • Antecedentes familiares. Alrededor del 5% de los tumores cerebrales pueden estar vinculados a afecciones o factores genéticos hereditarios, entre ellos síndrome de Li-Fraumeni (en inglés), neurofibromatosis (en inglés), síndrome de carcinoma de células basales nevoides, esclerosis tuberosa, síndrome de Turcot, y enfermedad de von Hippel-Lindau. Los científicos también han encontrado “grupos” de tumores cerebrales dentro de algunas familias sin un vínculo con estas afecciones hereditarias conocidas. Se están realizando estudios para intentar encontrar una causa para estos grupos.

  • Exposición a infecciones, virus y alérgenos. La infección por el virus de Epstein-Barr (VEB) aumenta el riesgo de linfoma del SNC. El VEB se conoce con más frecuencia como el virus que causa mononucleosis o “mono”. En otra investigación, se han encontrado niveles altos de un virus común llamado citomegalovirus (CMV) en el tejido del tumor cerebral. El significado de este hallazgo se está investigando. Se ha demostrado que varios tipos de otros virus causan tumores cerebrales en investigaciones en animales. Se necesitan más datos para averiguar si la exposición a infecciones, otros virus o alérgenos aumenta el riesgo de un tumor cerebral en las personas. Cabe destacar que los estudios han demostrado que los pacientes con antecedentes de alergias o trastornos cutáneos tienen un menor riesgo de glioma.

  • Campos electromagnéticos. La mayoría de los estudios que evalúan la función de los campos electromagnéticos, como la energía de líneas eléctricas o del uso de teléfonos móviles, no muestran ninguna relación con un mayor riesgo de desarrollar un tumor cerebral en adultos. Debido a la información contradictoria sobre el riesgo en los niños, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda limitar el uso de teléfonos celulares y promueve el uso de auriculares manos libres tanto para adultos como para niños.

  • Raza y origen étnico. En los Estados Unidos, las personas de raza blanca tienen más probabilidades de desarrollar gliomas, pero menos probabilidad de desarrollar meningioma que las personas de raza negra. Además, las personas del norte de Europa tienen más del doble de probabilidades de desarrollar un tumor cerebral que las personas de Japón.

  • Radiación ionizante. Se ha demostrado que haber tenido un tratamiento previo en el cerebro o en la cabeza con radiación ionizante, incluidos rayos X, es un factor de riesgo para un tumor cerebral.

  • Lesión en la cabeza y convulsiones. Los traumatismos craneales graves se han estudiado durante mucho tiempo por su relación con los tumores cerebrales. Algunos estudios han demostrado una relación entre el traumatismo craneal y el meningioma, pero no entre el traumatismo craneal y el glioma. También se ha relacionado un historial de convulsiones con tumores cerebrales, pero debido a que un tumor cerebral puede causar convulsiones, no se sabe si las convulsiones aumentan el riesgo de tumores cerebrales, si las convulsiones ocurren debido al tumor o si los medicamentos anticonvulsivos aumentan el riesgo.

  • Compuestos N-nitrosos. Algunos estudios de suplementos dietéticos y vitamínicos parecen indicar que los compuestos N-nitrosos de la dieta pueden aumentar el riesgo de tumores cerebrales tanto en niños como en adultos. Los compuestos N-nitrosos de la dieta se forman en el cuerpo a partir de nitritos o nitratos que se encuentran en algunas carnes curadas, humo de cigarrillos y cosméticos. Sin embargo, es necesario realizar investigaciones adicionales antes de establecer un vínculo definitivo.

La siguiente sección de esta guía es Síntomas y signos. Explica los cambios en el cuerpo o los problemas médicos que puede provocar un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Síntomas y signos

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará más información sobre los cambios en el cuerpo y otras cosas que pueden indicar un problema que puede requerir atención médica. Use el menú para ver otras páginas.

Las personas con un tumor cerebral pueden experimentar los siguientes síntomas o signos. Un síntoma es algo que solo la persona que lo experimenta puede identificar y describir, como fatiga, náuseas o dolor. Un signo es algo que otras personas pueden identificar y medir, como fiebre, erupción cutánea o pulso elevado. Juntos, los signos y las síntomas pueden ayudar a describir un problema médico. A veces, las personas con un tumor cerebral no manifiestan ninguno de los signos y síntomas mencionados a continuación. O bien la causa de estos síntomas puede ser otra afección médica diferente que no sea un tumor cerebral.

Los síntomas de un tumor cerebral pueden ser generales o específicos. Un síntoma general es causado por la presión del tumor en el cerebro o la médula espinal. Los síntomas específicos se producen cuando una parte específica del cerebro no funciona bien debido al tumor. A muchas personas con un tumor cerebral, se les diagnosticó cuando acudieron al médico después de experimentar un problema, como dolor de cabeza u otros cambios.

Los síntomas generales incluyen:

  • Dolores de cabeza, que pueden ser graves y empeorar con actividad o a primera hora de la mañana

  • Convulsiones. Las personas pueden experimentar diferentes tipos de convulsiones. Ciertos fármacos pueden ayudar a prevenirlas o controlarlas. Las convulsiones motoras, son movimientos repentinos e involuntarios de los músculos de una persona. Los diferentes tipos de convulsiones y su aspecto se enumeran a continuación:

    • Mioclónicas

      • Contracciones, sacudidas, espasmos musculares únicos o múltiples

    • Tónico-clónicas (de gran mal)

      • Pérdida de la conciencia y del tono corporal, seguida de espasmos y relajación de los músculos que se denominan contracciones

      • Pérdida del control de las funciones corporales, como pérdida de control de la vejiga

      • Puede ser un período corto de 30 segundos sin respirar y la piel de una persona puede tornarse de un tono azul, púrpura, gris, blanco o verde

      • Después de este tipo de convulsión, una persona puede tener sueño y experimentar dolor de cabeza, confusión, debilidad, entumecimiento y dolor en los músculos

    • Sensoriales

      • Cambio en la sensación, la visión, el olfato o el oído sin perder el conocimiento

    • Parciales complejas

      • Pueden causar una pérdida de la conciencia o una pérdida total o parcial del conocimiento

      • Pueden asociarse a movimientos repetitivos y no intencionados, como contracciones

    • Cambios de personalidad o de memoria

    • Náuseas o vómitos

    • Fatiga

    • Aletargamiento

    • Problemas para dormir

    • Problemas de memoria

    • Cambios en la capacidad para caminar o realizar actividades cotidianas

Los síntomas que pueden ser específicos de la ubicación del tumor incluyen:

  • Presión o dolor de cabeza cerca del tumor.

  • La pérdida del equilibrio y la dificultad con las habilidades motoras finas están relacionadas con un tumor en el cerebelo.

  • Los cambios en el juicio, incluida la pérdida de iniciativa, la lentitud y la debilidad o parálisis muscular se asocian con un tumor en el lóbulo frontal del encéfalo.

  • La pérdida total o parcial de la visión es causada por un tumor en el lóbulo occipital o en el lóbulo temporal del encéfalo.

  • Los cambios en el habla, la audición, la memoria o el estado emocional, como la agresividad y los problemas para comprender o recuperar palabras, pueden desarrollarse a partir de un tumor en el lóbulo frontal y temporal del encéfalo.

  • La percepción alterada del tacto o la presión, la debilidad del brazo o la pierna en 1 lado del cuerpo o la confusión con los lados izquierdo y derecho del cuerpo están relacionados con un tumor en el lóbulo frontal o parietal del encéfalo.

  • La incapacidad para mirar hacia arriba puede deberse a un tumor de la glándula pineal.

  • La lactancia, que es la secreción de la leche materna, la alteración de los períodos menstruales en las mujeres y el crecimiento de las manos y los pies en los adultos están relacionados con un tumor pituitario.

  • La dificultad para tragar, la debilidad o entumecimiento facial o la visión doble son síntomas de un tumor en el tronco encefálico.

  • Los cambios en la visión, incluida la pérdida de parte de la visión o la visión doble, pueden deberse a un tumor en el lóbulo temporal, el lóbulo occipital o el tronco encefálico.

Si le preocupa algún cambio que ha experimentado, por favor hable con su médico. Su médico le preguntará desde cuándo y con qué frecuencia ha experimentado el (los) síntoma(s), entre otras preguntas. Esto es para ayudar a detectar la causa del problema, lo que se denomina diagnóstico.

Si se diagnostica un tumor cerebral, el alivio de los síntomas sigue siendo un aspecto importante de la atención y del tratamiento. Esto puede llamarse cuidados paliativos o atención médica de apoyo. Generalmente, el alivio de los síntomas comienza poco después del diagnóstico y continúa durante todo el tratamiento. Asegúrese de hablar con su equipo de atención médica sobre los síntomas que experimenta, incluido cualquier síntoma nuevo o cambio en los síntomas. Obtenga más información sobre el tratamiento de los síntomas de un tumor cerebral en la sección Tipos de tratamiento.

La siguiente sección de esta guía es Diagnóstico. Explica qué pruebas pueden ser necesarias para conocer más sobre la causa de los síntomas. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor Cerebral - Diagnóstico

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará una lista de pruebas, procedimientos y exploraciones frecuentes que los médicos usan para averiguar la causa de un problema médico. Use el menú para ver otras páginas.

Los médicos utilizan muchas pruebas para encontrar o diagnosticar un tumor cerebral y descubrir el tipo de tumor cerebral. También realizan pruebas para descubrir si se ha diseminado a otras partes del cuerpo desde el lugar donde se inició. Esto se llama metástasis y es poco común en un tumor cerebral primario. Los médicos también pueden hacer pruebas para determinar qué tratamientos podrían funcionar mejor.

Para la mayoría de los tipos de tumores, tomar una muestra del posible tumor es la única forma segura de que el médico sepa si un área del cuerpo tiene un tumor. Esto se puede hacer mediante un procedimiento llamado biopsia o extirpando parte del tumor o todo el tumor con cirugía. Durante una biopsia, el médico toma una pequeña muestra de tejido para hacerle pruebas en un laboratorio. Si no se puede realizar, el médico puede sugerir que se lleven a cabo otras pruebas que ayuden a establecer un diagnóstico.

Cómo se diagnostica un tumor cerebral

Las pruebas por imágenes pueden ayudar a los médicos a determinar si el tumor es un tumor cerebral primario o si se trata de un cáncer que se ha diseminado al cerebro desde otra parte del cuerpo. Las pruebas por imágenes muestran imágenes del interior del cuerpo. Su médico puede considerar estos factores al elegir una prueba de diagnóstico:

  • Tipo de tumor que se sospecha

  • Sus signos y síntomas

  • Su edad y estado de salud general

  • Los resultados de pruebas médicas anteriores

La mayoría de los tumores cerebrales no se diagnostican hasta después de que aparezcan los síntomas. A menudo, un internista o un neurólogo diagnostican inicialmente un tumor cerebral. Un internista es un médico especializado en el tratamiento de adultos. Un neurólogo es un médico especializado en problemas del cerebro y el sistema nervioso central.

Además de pedirle al paciente antecedentes médicos detallados y realizar un examen físico, el médico puede recomendar que se hagan las pruebas que se describen a continuación. Estas pruebas sirven para averiguar la presencia y, a veces, el tipo o grado de un tumor cerebral.

En general, el diagnóstico de un tumor cerebral suele comenzar con una resonancia magnética (RM). Una vez que la RM muestra que hay un tumor en el cerebro, la forma más frecuente de determinar el tipo de tumor cerebral es examinar los resultados de una muestra de tejido después de una biopsia o cirugía. Estas pruebas y procedimientos se describen a continuación más detalladamente.

  • Resonancia magnética (RM). Una RM usa campos magnéticos, en lugar de rayos X, para producir imágenes detalladas del cuerpo. Se puede usar la RM para medir el tamaño del tumor. Antes de la exploración, se administra un tinte especial denominado medio de contraste a fin de crear una imagen más clara. Este tinte se puede inyectar en una vena del paciente o puede administrarse en forma de comprimido o líquido para tragar. Las RM crean imágenes más detalladas que las exploraciones por tomografía computarizada (TC, consulte a continuación) y son la forma preferida de diagnosticar un tumor cerebral. La RM puede ser del cerebro, la médula espinal o ambos, dependiendo del tipo de tumor sospechado y de la probabilidad de que se disemine en el SNC. Existen diferentes tipos de RM. Los resultados de una exploración neurológica realizada por el internista o el neurólogo ayudan a determinar qué tipo de RM se debe usar.

    • La RM con gadolinio por vía intravenosa (i.v.) suele usarse para ayudar a crear una imagen más clara de un tumor cerebral. Esto se da cuando un paciente se somete a una RM habitual y después recibe un tipo especial de medio de contraste llamado gadolinio a través de una vía i.v. A continuación, se realiza una segunda RM para obtener otra serie de imágenes con el tinte.

    • La técnica de RM llamada “imágenes ponderadas por difusión” ayuda a mostrar la estructura celular del cerebro. Otra técnica llamada “imágenes de perfusión” muestra la cantidad de sangre que llega al tumor. Estos métodos pueden ayudar a los médicos a predecir cómo funcionará el tratamiento.

    • Se puede utilizar una RM espinal para diagnosticar un tumor en la columna vertebral o cerca de ella.

    • La RM funcional (RMf) proporciona información sobre la ubicación de las áreas específicas del cerebro que son responsables del movimiento muscular y del habla. Durante la examinación por RMf, se pide al paciente que haga ciertas tareas que causen cambios en el cerebro y que se puedan ver en la imagen de la RMf. Esta prueba se utiliza para ayudar a planificar la cirugía, de modo que el cirujano pueda evitar dañar las partes funcionales del cerebro mientras se extirpa el tumor.

    • La espectroscopia por resonancia magnética es una prueba que utiliza una RM que proporciona información sobre la composición química del cerebro. Puede ayudar a determinar la diferencia entre cualquier tejido muerto causado por tratamientos anteriores de radiación y nuevas células tumorales en el cerebro.

  • Obtención de muestras de tejido/biopsia/extirpación quirúrgica de un tumor. Por lo general, se necesita una muestra del tejido del tumor para hacer un diagnóstico final. Una biopsia es la extracción de una pequeña cantidad de tejido para examinarla con un microscopio y es la única forma definitiva de diagnosticar un tumor cerebral. Luego, un patólogo analiza la(s) muestra(s). Un patólogo es un médico que se especializa en interpretar pruebas de laboratorio y evaluar células, tejidos y órganos para diagnosticar enfermedades. Se puede realizar una biopsia como parte de la cirugía para extirpar todo el tumor. O la cirugía se puede realizar como un procedimiento separado si no es posible extirpar completamente el tumor debido a su ubicación o la salud del paciente.

Su equipo de atención médica también puede recomendar otras pruebas para ayudar a hacer un diagnóstico o averiguar qué tan bien está funcionando el tratamiento. No todas las pruebas enumeradas a continuación se utilizarán para todas las personas.

  • Exploración por TC. La exploración por TC toma imágenes del interior del cuerpo desde diferentes ángulos utilizando rayos X. Una computadora combina estas imágenes en una imagen tridimensional detallada que muestra las anomalías o los tumores. Una exploración por TC puede ayudar a detectar hemorragia y agrandamiento de los espacios con líquido en el cerebro, llamados ventrículos. Los cambios en el hueso del cráneo también se pueden ver en una exploración por TC y se puede usar para medir el tamaño de un tumor. También se puede usar una exploración por TC si el paciente no puede someterse a una RM, como si la persona tuviese un marcapasos para el corazón. A veces, se administra un medio de contraste antes de la exploración, a fin de proporcionar mejores detalles de la imagen. Este tinte se puede inyectar en una vena del paciente o puede administrarse en forma de comprimido o líquido para tragar.

  • Exploración por tomografía por emisión de positrones (TEP) o TEP-TC. Al principio, se utiliza una exploración por tomografía por emisión de positrones (TEP) para obtener más información sobre el tumor mientras el paciente recibe tratamiento. También se puede utilizar si el tumor reaparece después del tratamiento. Una exploración por TEP generalmente se combina con una exploración por TC (consulte anteriormente), lo cual se denomina exploración por TEP-TC. Sin embargo, es posible que escuche al médico referirse a este procedimiento como simplemente una exploración por TEP. La exploración por TEP es una forma de crear imágenes de los órganos y los tejidos internos del cuerpo usando varias sustancias como azúcares o proteínas. Se inyecta una pequeña cantidad de una sustancia radioactiva en el cuerpo del paciente. Esta sustancia es absorbida por células que se dividen activamente. Debido a que las células tumorales son más propensas a dividirse activamente, absorben más la sustancia radioactiva. Sin embargo, la cantidad de radiación en la sustancia es demasiado baja para ser dañina. Luego, una exploración detecta esta sustancia para generar imágenes del interior del cuerpo.

  • Arteriografía cerebral, también llamado angiografía cerebral. Una arteriografía cerebral es una radiografía, o una serie de rayos X, de la cabeza que muestra las arterias del cerebro. Las radiografías se toman después de inyectar un colorante especial llamado medio de contraste en las principales arterias de la cabeza del paciente.

  • Punción lumbar o punción espinal. Una punción lumbar es un procedimiento en el que se usa una aguja para tomar una muestra de líquido cefalorraquídeo (LCR) para buscar células tumorales, sangre o marcadores tumorales. Los marcadores tumorales o biomarcadores son sustancias que se encuentran en cantidades superiores a lo normal en sangre, orina, líquido cefalorraquídeo, plasma u otros fluidos corporales en personas con ciertos tipos de tumores. Normalmente, se administra un anestésico local para adormecer la parte baja de la espalda del paciente antes del procedimiento.

  • Mielograma. El médico puede recomendar un mielograma para averiguar si el tumor se ha diseminado al líquido cefalorraquídeo, a otras partes del cerebro o a la médula espinal. Un mielograma utiliza un tinte inyectado en el LCR que rodea la médula espinal. El tinte se muestra en una radiografía y puede delinear la médula espinal para ayudar al médico a buscar un tumor. Esto rara vez se hace; una punción lumbar (consulte anteriormente) es más frecuente.

  • Pruebas de biomarcadores del tumor. Es posible que el médico recomiende realizar análisis de laboratorio en una muestra tumoral a fin de identificar genes específicos, proteínas y otros factores, como marcadores tumorales exclusivos del tumor. Algunos biomarcadores pueden ayudar a los médicos a determinar el pronóstico de un paciente, que es la posibilidad de recuperación (consulte Grados y factores pronósticos). Los investigadores están examinando biomarcadores para encontrar formas de diagnosticar un tumor cerebral antes de que empiecen los síntomas. Los resultados de estas pruebas pueden ayudar a decidir sus opciones de tratamiento. Los marcadores que se observan con más frecuencia para los tumores cerebrales incluyen:

    • Para el oligodendroglioma, la pérdida del grupo p del cromosoma 1 y la pérdida del grupo q del cromosoma 19. Esto se denomina codeleción 1p/19q. Está relacionado con un tratamiento más exitoso, particularmente con quimioterapia. Se puede utilizar para ayudar a planificar el tratamiento, en especial para el oligodendroglioma anaplásico.

    • Una mutación en el gen de la isocitrato deshidrogenasa (IDH), que se encuentra en alrededor del 70% al 80% de los gliomas de grado bajo en adultos. Los tumores de grado superior también pueden tener mutaciones en el gen IDH, lo que sugiere que estos tumores comenzaron como tumores de grado inferior que pasaron a ser de grado superior. Esta mutación se relaciona con un mejor pronóstico tanto en tumores de bajo grado como de alto grado.

    • En el glioblastoma, la modificación de un gen llamado metil guanina metil transferasa (MGMT) puede ayudar al médico a comprender el pronóstico del paciente y qué tan bien funcionará el tratamiento. Su función a la hora de determinar el beneficio del tratamiento se está probando en ensayos clínicos.

  • Pruebas neurológicas, de visión y auditivas. Estas pruebas ayudan a determinar si un tumor afecta la forma en que funciona el cerebro. Una exploración ocular puede detectar cambios en el nervio óptico, así como cambios en el campo de visión de una persona.

  • Evaluación neurocognitiva. Consiste en una evaluación detallada de todas las funciones principales del cerebro, como el almacenamiento y la recuperación de la memoria, las capacidades lingüísticas expresivas y receptivas, el cálculo, la destreza y el bienestar general del paciente. Estas pruebas las realiza un neuropsicólogo clínico autorizado. Este especialista redactará un informe formal para comparar con evaluaciones futuras o identificar problemas específicos que puedan resolverse a través del tratamiento.

  • Electroencefalograma (EEG). Un EEG es una prueba no invasiva en la que se conectan electrodos al exterior de la cabeza de una persona para medir la actividad eléctrica del cerebro. Se utiliza para controlar posibles convulsiones (consulte Síntomas y signos).

  • Potenciales evocados. Los potenciales evocados implican el uso de electrodos para medir la actividad eléctrica de los nervios y, a menudo, pueden detectar el schwannoma acústico, un tumor cerebral no canceroso. Esta prueba se puede utilizar como guía al extirpar un tumor que crece alrededor de nervios importantes.

Resultados de las pruebas

Después de que se realicen las pruebas de diagnóstico, el médico revisará los resultados de las pruebas con usted. Si el diagnóstico es un tumor cerebral, se realizarán pruebas adicionales para obtener más información sobre el tumor. Los resultados ayudan al médico a describir el tumor y a planificar su tratamiento.

La siguiente sección de esta guía es Grados y factores pronósticos. Explica el sistema que los médicos utilizan para describir un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Grados y factores pronósticos

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: obtendrá información sobre cómo los médicos describen el crecimiento o la diseminación de un tumor cerebral. Esto se conoce como grado. También obtendrá información sobre los factores pronósticos que usan los médicos para ayudar a planificar el tratamiento. Use el menú para ver otras páginas.

Para la mayoría de los otros tipos de tumores en otras partes del cuerpo, se usa un sistema de estadificación para describir dónde está ubicado un tumor, si se ha diseminado o hacia dónde y si está afectando otras partes del cuerpo. Sin embargo, no existe un sistema de estadificación sistémico recomendado para los tumores cerebrales en adultos porque la mayoría de los tumores cerebrales primarios no suelen diseminarse más allá del sistema nervioso central. En cambio, siempre se usa el sistema de clasificación que se describe a continuación porque las características específicas de un tumor cerebral determinan qué tan canceroso es y qué tan probable es que crezca.

Factores pronósticos

Para decidir sobre el mejor tratamiento para un tumor cerebral, se debe determinar tanto el tipo como el grado del tumor. Hay varios factores que ayudan a los médicos a determinar el plan de tratamiento adecuado para el tumor cerebral y el pronóstico del paciente:

  • Histología tumoral. Tal como se describe en la sección Diagnóstico, se ha extirpado una muestra del tumor para su análisis. La histología tumoral incluye descubrir el tipo de tumor, el grado y las características moleculares adicionales que predicen la rapidez de crecimiento del tumor. Juntos, estos factores ayudarán a su médico a comprender cómo se comportará probablemente el tumor. Estos factores también pueden ayudar a determinar sus opciones de tratamiento.

    El grado describe ciertas características del tumor que están vinculadas a resultados específicos. Por ejemplo, los médicos pueden considerar si las células tumorales están creciendo fuera del control o si hay muchas células muertas. Los tumores con características generalmente relacionadas con un crecimiento más rápido reciben un grado más alto. Para la mayoría de los tumores, cuanto menor es el grado, mejor es el pronóstico.

    Específicamente para los tumores gliales, el grado está determinado por sus características, vistas al microscopio, de acuerdo con los siguientes criterios:

    • Grado I. Estos tumores tienen un crecimiento lento y son poco propensos a diseminarse. Con frecuencia se pueden extirpar con cirugía.

    • Grado II. Es menos probable que estos tumores crezcan y se diseminen, pero es más probable que vuelvan después del tratamiento.

    • Grado III. Es más probable que estos tumores tengan células que se dividen rápidamente, pero no células muertas. Pueden crecer rápido.

    • Grado IV. En un tumor de grado IV, las células del tumor se dividen activamente. Además, el tumor tiene tanto crecimiento de vasos sanguíneos como áreas de tejido muerto. Estos tumores pueden crecer y propagarse rápido.

  • Edad. En los adultos, la edad y el nivel de funcionamiento de una persona, llamados estado funcional (consulte a continuación), cuando se diagnostica, es una de las mejores formas de predecir el pronóstico de un paciente. En general, un adulto más joven tiene un mejor pronóstico.

  • Síntomas. Los síntomas que tiene un paciente y su duración también pueden ayudar a determinar el pronóstico. Por ejemplo, las convulsiones y tener síntomas durante mucho tiempo se relacionan con un mejor pronóstico.

  • Extensión del tumor residual.La resección es una cirugía para extirpar un tumor. Residual se refiere a la cantidad de tumor que queda en el cuerpo después de la cirugía. El pronóstico de un paciente es mejor cuando se puede extirpar quirúrgicamente todo el tumor. Hay 4 clasificaciones:

    • Total: se ha extirpado todo el tumor. Sin embargo, pueden permanecer células microscópicas.

    • Subtotal: se han extirpado grandes partes del tumor.

    • Parcial: solo se extirpó una parte del tumor.

    • Biopsia solamente: solo se ha extirpado una pequeña porción utilizada para una biopsia.

  • Ubicación del tumor. Un tumor puede formarse en cualquier parte del cerebro. Algunas ubicaciones de tumores causan más daño que otras y algunos tumores son más difíciles de tratar debido a su ubicación.

  • Características moleculares. Ciertas mutaciones genéticas que se encuentran en el tumor pueden ayudar a determinar el pronóstico. Estas incluyen las siguientes: IDH1, IDH2, MGMT, y una codeleción de 1p/19q. A veces, si un tumor presenta alguna de estas mutaciones, se determina el tipo de tumor cerebral diagnosticado.

    • 100: Normal, sin quejas, sin evidencia de enfermedad.

    • 90: Capaz de seguir con la actividad normal; síntomas leves de enfermedad.

    • 80: Actividad normal con esfuerzo; algunos síntomas de enfermedad.

    • 70: Capaz del cuidado personal; incapaz de seguir con actividad normal o trabajo activo.

    • 60: Requiere asistencia ocasional pero puede atender sus necesidades.

    • 50: Requiere asistencia considerable y atención médica frecuente.

    • 40: Incapacitado, requiere de atención y asistencia especiales.

    • 30: Gravemente incapacitado; se indica hospitalización, pero la muerte no es inminente.

    • 20: Muy enfermo, son necesarios hospitalización y tratamiento activo.

    • 10: Moribundo, procesos fatales que avanzan rápidamente.

  • Diseminación metastásica. Un tumor que comienza en el cerebro o la médula espinal, incluso si es canceroso, rara vez se disemina a otras partes del cuerpo en los adultos, pero puede crecer dentro del SNC. Por esa razón, con pocas excepciones, las pruebas que examinan los otros órganos del cuerpo generalmente no son necesarias. Un tumor que se disemina a otras partes del cerebro o a la médula espinal se relaciona con un peor pronóstico.

  • Tumor recurrente. Un tumor recurrente es aquel que ha vuelto a aparecer después del tratamiento. Si el tumor regresa, se realizará otra serie de pruebas para obtener información sobre el alcance de la recurrencia. Esas pruebas y exploraciones a menudo son similares a aquellas que se realizan al momento del diagnóstico original.

Actualmente, los factores que se enumeraron anteriormente son los mejores indicadores del pronóstico de un paciente. Tal como se explica en Diagnóstico, los investigadores actualmente buscan biomarcadores en el tejido tumoral que podrían hacer que un tumor cerebral sea más fácil de diagnosticar y permitir la estadificación de un tumor cerebral adulto en el futuro. Los investigadores también están examinando otras pruebas genéticas que pueden predecir el pronóstico de un paciente. Es posible que estas herramientas algún día ayuden a los médicos a predecir la probabilidad de que crezca un tumor cerebral, desarrollar tratamientos más efectivos y predecir el pronóstico con mayor precisión.

Utilizado con el permiso del Colegio Estadounidense de Cirujanos (American College of Surgeons), Chicago, Illinois. La fuente original y principal de esta información es AJCC Cancer Staging Manual, octava edición (2017), publicado por Springer International Publishing.

La información sobre el grado del tumor, así como los factores pronósticos, ayudarán al médico a recomendar un plan de tratamiento específico. La siguiente sección de esta guía es Tipos de tratamiento. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Tipos de tratamiento

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: obtendrá información sobre los diferentes tipos de tratamiento que los médicos usan en las personas con tumor cerebral. Use el menú para ver otras páginas.

En esta sección, se explican los tipos de tratamientos que son el estándar de atención para un tumor cerebral. “Estándar de atención” significa los mejores tratamientos conocidos. Al tomar decisiones relacionadas con el plan de tratamiento, se le recomienda que considere la opción de participar en ensayos clínicos. Un ensayo clínico es un estudio de investigación que prueba un nuevo enfoque al tratamiento. Los médicos quieren conocer si el nuevo tratamiento es seguro, eficaz y posiblemente mejor que el tratamiento estándar. Los ensayos clínicos pueden evaluar un nuevo fármaco, una nueva combinación de tratamientos estándares o nuevas dosis de fármacos estándares u otros tratamientos. Los ensayos clínicos son una opción para tener en cuenta para el tratamiento y la atención en todos los tipos de tumor cerebral. Su médico puede ayudarlo a considerar todas sus opciones de tratamiento. Obtenga más información sobre los ensayos clínicos en las secciones Acerca de los ensayos clínicos y Últimas investigaciones de esta guía.

Cómo se trata un tumor cerebral

En la atención del tumor cerebral, a menudo trabajan juntos distintos tipos de médicos para crear un plan de tratamiento integral de los pacientes que combine distintos tipos de tratamiento. Esto se denomina equipo multidisciplinario. Su equipo de atención puede incluir una variedad de otros profesionales de atención médica; por ejemplo, auxiliares médicos, enfermeros profesionales con práctica médica, enfermeros de oncología, trabajadores sociales, farmacéuticos, asesores, dietistas, especialistas en rehabilitación y otros. Es importante tener un equipo de atención que se especialice en la atención de personas con un tumor cerebral, lo que puede significar hablar con profesionales médicos fuera de su área local para ayudar con el diagnóstico y la planificación del tratamiento.

A continuación, se enumeran las descripciones de los tipos frecuentes de tratamientos que se usan para un tumor cerebral. Su plan de atención también puede incluir tratamiento para síntomas y efectos secundarios, una parte importante de su atención médica.

Las opciones y recomendaciones de tratamiento dependen de varios factores:

  • Tamaño, tipo y grado del tumor

  • Si el tumor está presionando las partes vitales del cerebro

  • Si el tumor se ha diseminado a otras partes del SNC o del cuerpo

  • Efectos secundarios posibles

  • Las preferencias del paciente y su estado de salud general

Algunos tipos de tumores cerebrales crecen rápido; otros tumores crecen lento. Teniendo en cuenta todos estos factores, su médico hablará con usted sobre qué tan pronto debe comenzar el tratamiento después del diagnóstico.

Las opciones de tratamiento incluyen las que se describen a continuación, como cirugía, radioterapia, quimioterapia y terapia dirigida.

En el caso de un tumor cerebral de bajo grado, la cirugía puede ser el único tratamiento necesario, especialmente si se puede extirpar todo el tumor. Si hay tumor visible restante después de la cirugía, se podrá utilizar radioterapia y quimioterapia. En el caso de los tumores de grado superior, el tratamiento suele comenzar con la cirugía, seguido de radioterapia y quimioterapia. Su equipo de atención médica trazará un plan de tratamiento exacto.

El tratamiento exitoso de los tumores cerebrales puede ser un desafío. Normalmente, la barrera hematoencefálica del cuerpo protege el cerebro y la médula espinal de productos químicos perjudiciales. Sin embargo, esta barrera también repele a muchos tipos de quimioterapia. La cirugía puede ser difícil si el tumor está cerca de una parte delicada del cerebro o de la médula espinal. Incluso cuando el cirujano puede extirpar completamente el tumor original, es posible que queden partes del tumor que sean demasiado pequeñas para ser vistas o extirpadas durante la cirugía. La radioterapia también puede dañar el tejido sano.

Sin embargo, las investigaciones en los últimos 20 años han ayudado a alargar significativamente la vida de muchas personas con un tumor cerebral. Estos avances incluyen cirugías más refinadas, una mejor comprensión de los tipos de tumores que responden a la quimioterapia y otros medicamentos y una administración más dirigida de radioterapia.

Tómese el tiempo para obtener información sobre todas sus opciones de tratamiento y asegúrese de hacer preguntas sobre cosas que no estén claras. Hable con su médico acerca de los objetivos de cada tratamiento y lo que puede esperar mientras recibe el tratamiento. Estos tipos de conversaciones se denominan “toma de decisiones compartida”. La toma de decisiones compartida es cuando usted y sus médicos trabajan juntos para elegir tratamientos que se ajusten a los objetivos de su atención. La toma de decisiones compartida es particularmente importante para un tumor cerebral porque existen diferentes opciones de tratamiento. Obtenga más información sobre la toma de decisiones sobre el tratamiento.

Efectos físicos, emocionales y sociales de un tumor cerebral

El tumor cerebral y su tratamiento producen síntomas y efectos secundarios físicos, así como efectos emocionales, sociales y económicos. El manejo de estos efectos se denomina cuidados paliativos o atención médica de apoyo. Es una parte importante de su atención que se incluye junto con los tratamientos que tienen como fin retrasar, detener o eliminar el tumor.

Los cuidados paliativos se centran en mejorar cómo se siente durante el tratamiento al manejar los síntomas y brindar apoyo a los pacientes y sus familias con otras necesidades no médicas. Cualquier persona, independientemente de la edad o del tipo y estadio del tumor, puede recibir este tipo de atención. Y en general funciona mejor cuando se inicia poco después del diagnóstico del tumor cerebral. Las personas que reciben cuidados paliativos junto con el tratamiento para el tumor con frecuencia tienen síntomas menos graves y mejor calidad de vida, e informan que están más satisfechas con el tratamiento.

Los tratamientos paliativos varían ampliamente y, con frecuencia, incluyen medicamentos, cambios nutricionales, técnicas de relajación, apoyo emocional y espiritual, y otras terapias. Usted también puede recibir tratamientos paliativos similares a los utilizados para eliminar el tumor, como quimioterapia, cirugía o radioterapia.

Algunos de los síntomas de un tumor cerebral pueden ser graves y tener un enorme impacto en las vidas diarias de los pacientes y sus cuidadores familiares. Sin embargo, a menudo, los síntomas se pueden tratar con el uso de ciertos medicamentos. Los cuidados paliativos para las personas con tumor cerebral incluyen:

  • Corticoesteroides. Se utilizan estos fármacos para reducir la inflamación del cerebro, lo que puede reducir el dolor provocado por la inflamación sin la necesidad de medicamentos recetados para el dolor. Estos medicamentos también pueden ayudar a mejorar los síntomas neurológicos al disminuir la presión del tumor y la inflamación del tejido cerebral sano.

  • Medicamentos anticonvulsivos. Estos ayudan a controlar las convulsiones, y hay varios tipos de fármacos disponibles. Su neurólogo se los recetará.

Antes de comenzar con el tratamiento, hable con su médico sobre los objetivos de cada tratamiento recomendado en el plan de tratamiento. También debe hablar sobre los efectos secundarios posibles del plan de tratamiento específico y las opciones de cuidados paliativos. Muchos pacientes también se benefician al hablar con un trabajador social y participar en grupos de apoyo. Pregúntele también a su médico sobre estos recursos.

Durante el tratamiento, su equipo de atención médica puede pedirle que responda preguntas sobre sus síntomas y efectos secundarios, y que describa cada problema. Asegúrese de informar al equipo de atención médica si experimenta algún problema. Esto ayuda a que el equipo de atención médica pueda tratar cualquier síntoma y efecto secundario lo más rápido posible. También puede ayudar a prevenir problemas más graves en el futuro.

Obtenga más información sobre la importancia de llevar un registro de los efectos secundarios en otra parte de esta guía. Obtenga más información sobre los cuidados paliativos en una sección diferente de este sitio web.

Cirugía

La cirugía es la extirpación del tumor y de parte del tejido circundante sano durante una operación. Normalmente, es el primer tratamiento utilizado para un tumor cerebral. A menudo, es el único tratamiento necesario para un tumor cerebral de bajo grado. La extirpación del tumor puede mejorar los síntomas neurológicos, proporcionar tejido para el diagnóstico y el análisis genético, ayudar a hacer que otros tratamientos para el tumor cerebral sean más eficaces y, en muchos casos, mejorar el pronóstico de una persona con un tumor cerebral.

Un neurocirujano es un médico especializado en cirugía de cerebro y columna vertebral. La cirugía de cerebro requiere la extracción de parte del cráneo, un procedimiento llamado craneotomía. Después de que el cirujano extirpa el tumor, se usará el propio hueso del paciente para cubrir la abertura del cráneo.

Se han producido avances rápidos en la intervención quirúrgica para tumores cerebrales, incluido el uso de mapeo cortical, imágenes realzadas y tintes fluorescentes.

  • El mapeo cortical permite a los médicos identificar las zonas del cerebro que controlan los sentidos, el lenguaje y las habilidades motoras.

  • Los dispositivos de imágenes mejoradas brindan a los cirujanos más herramientas para planificar y realizar la cirugía. Por ejemplo, las técnicas basadas en computadora, como la cirugía guiada por imágenes, ayudan a los cirujanos a trazar la ubicación del tumor con mucha precisión. Sin embargo, es una técnica muy especializada que puede que no esté disponible en todos lados.

  • Se puede administrar un tinte fluorescente, llamado ácido 5 aminolevulínico, por vía oral la mañana antes de la cirugía. Este tinte es absorbido por las células tumorales. Los médicos pueden usar un microscopio especial y una luz para ver las células que han absorbido el tinte durante la cirugía. Esto ayuda a los médicos a eliminar de forma segura la mayor cantidad posible de tumor.

Para un tumor que está cerca del centro del habla del cerebro, es cada vez más frecuente realizar la operación cuando el paciente está despierto durante parte de la cirugía. Por lo general, el paciente se despierta una vez que se expone la superficie del cerebro. A continuación, se utilizan técnicas de estimulación eléctrica especiales para localizar la parte específica del cerebro que controla el habla. Este método puede ayudar a evitar causar daño al extirpar el tumor.

Además de extirpar o reducir el tamaño del tumor cerebral, la cirugía puede proporcionar una muestra de tejido para el análisis de la biopsia, como se explica en Diagnóstico. En el caso de algunos tipos de tumores, los resultados de la biopsia pueden ayudar a determinar si la quimioterapia o la radioterapia serán útiles. En el caso de un tumor canceroso, incluso si no se puede curar, la extirpación puede aliviar los síntomas que causa el tumor al presionar el cerebro.

A veces, la cirugía no se puede realizar porque el tumor está ubicado en un lugar al que el cirujano no puede llegar o está cerca de una estructura vital. Estos tumores se denominan inoperables o no extirpables. Si el tumor no es operable, el médico recomendará otras opciones de tratamiento que también pueden incluir una biopsia o extirpación de una parte del tumor.

Antes de la cirugía, hable con el equipo de atención médica sobre los efectos secundarios posibles de la cirugía específica a la que se someterá. Obtenga más información sobre los conceptos básicos de la cirugía.

Radioterapia

La radioterapia es el uso de rayos X u otras partículas con alta potencia para destruir las células tumorales. Los médicos pueden usar radioterapia para retardar o detener el crecimiento de un tumor cerebral. Se suele administrar después de la cirugía y posiblemente junto con quimioterapia. El médico que se especializa en administrar radioterapia para tratar un tumor se conoce como radioncólogo. El tipo más frecuente de tratamiento con radiación se denomina radioterapia con haz externo, que es radiación administrada desde una máquina externa al cuerpo. Cuando se administra tratamiento con radiación usando implantes, el tratamiento se denomina radioterapia interna o braquiterapia. Un régimen o programa de radioterapia, normalmente consiste en una cantidad específica de tratamientos que se administran durante un período determinado.

La radioterapia de haz externo puede dirigirse a un tumor cerebral de las siguientes maneras:

  • Radioterapia convencional. La ubicación del tratamiento se determina en función de los puntos de referencia anatómicos y las radiografías. En ciertas situaciones, como la radioterapia cerebral completa para las metástasis cerebrales, esta técnica es adecuada. Para una focalización más precisa, se necesitan diferentes técnicas. La cantidad de radiación administrada depende del grado del tumor.

  • Radioterapia conformacional tridimensional. Usando imágenes de TC y RM (consulte Diagnóstico), se crea un modelo tridimensional del tumor y el tejido sano que lo rodea en una computadora. Este modelo se puede utilizar para dirigir los haces de radiación directamente al tumor, evitando que el tejido sano reciba altas dosis de radioterapia.

  • Radioterapia de intensidad modulada. La radioterapia de intensidad modulada es un tipo de radioterapia conformacional tridimensional (consulte anteriormente) que puede dirigirse de forma más objetiva al tumor. Puede administrar dosis más altas de radiación al tumor mientras administra menos al tejido sano circundante. En la radioterapia de intensidad modulada, los haces de radiación se dividen en haces más pequeños y la intensidad de cada uno de estos haces más pequeños puede cambiarse. Esto significa que los haces más intensos, o los haces que proporcionan más radiación, se pueden dirigir solo al tumor.

  • Terapia de protones. La terapia de protones es un tipo de radioterapia con haz externo que usa protones en lugar de rayos X. Con alta potencia, los protones pueden destruir las células tumorales. La terapia con haz de protones se usa generalmente para tumores cuando se necesita menos radiación debido a la ubicación. Esto incluye tumores que han crecido en huesos cercanos, como la base del cráneo, y los que están cerca del nervio óptico.

  • Radiocirugía estereotáctica.La radiocirugía estereotáctica es el uso de una sola dosis alta de radiación que se administra directamente al tumor y no al tejido sano. Funciona mejor para un tumor que se encuentra solo en 1 área del cerebro y ciertos tumores no cancerosos. También se puede usar cuando una persona tiene más de 1 tumor cerebral metastásico. Hay muchos tipos diferentes de equipos de radiocirugía estereotáctica, que incluyen:

    • Un acelerador lineal modificado es una máquina que crea radiación de alta energía mediante el uso de electricidad para formar una corriente de partículas subatómicas de rápido movimiento.

    • Un bisturí de rayos gamma es otra forma de radioterapia que concentra haces de radiación gamma altamente enfocados en el tumor.

    • Un bisturí cibernético es un dispositivo robótico que se usa en radioterapia para guiar la radiación hacia el tumor, particularmente en las regiones del cerebro, la cabeza y el cuello.

  • Radioterapia estereotáctica fraccionada. La radioterapia se administra con precisión estereotáctica, pero se divide en pequeñas dosis diarias llamadas fracciones y se administra durante varios días o semanas en contraste con la radiocirugía de 1 día. Esta técnica se utiliza para tumores ubicados cerca de estructuras sensibles, como los nervios ópticos o el tronco encefálico.

Con estas diferentes técnicas, los médicos intentan ser más precisos y reducir la exposición a la radiación en el tejido cerebral sano circundante. Según el tamaño y la ubicación del tumor, el radioncólogo puede elegir cualquiera de las técnicas de radiación anteriores. En ciertas situaciones, puede que funcione mejor una combinación de varias técnicas.

Los efectos secundarios a corto plazo de la radioterapia pueden incluir fatiga, reacciones cutáneas leves, pérdida de cabello, malestar estomacal y síntomas neurológicos, como problemas de memoria. La mayoría de los efectos secundarios desaparecen poco tiempo después de finalizado el tratamiento. Además, la radioterapia no suele recomendarse para niños menores de 5 años debido al alto riesgo de daños a su cerebro en desarrollo. Los efectos secundarios a largo plazo de la radioterapia dependen de la cantidad de tejido sano que recibió radiación e incluyen problemas de memoria y hormonales; y cambios cognitivos (procesos de pensamiento), como dificultad para comprender y realizar tareas complejas.

Obtenga más información sobre los aspectos básicos de la radioterapia.

Terapias con medicamentos

Se usan los tratamientos con medicamentos para destruir las células cancerosas. Se pueden administrar medicamentos a través del torrente sanguíneo para llegar a las células cancerosas de todo el cuerpo. Cuando se administra un medicamento de esta manera, se denomina terapia sístemica. Los medicamentos también se puede administrar localmente, que es cuando la medicación se aplica directamente al cáncer o se mantiene en una sola parte del cuerpo.

Generalmente, el profesional que receta las terapias sistémicas es un oncólogo clínico, un médico que se especializa en el tratamiento del tumor con medicamentos. Los tratamientos sistémicos también pueden ser administrados por un neuroncólogo.

Algunos de los métodos frecuentes para administrar terapias sistémicas incluyen un tubo intravenoso (i.v.) que se coloca en una vena con una aguja, o un comprimido o una cápsula que se traga (por vía oral). También se puede administrar a través de un catéter o puerto, que se utiliza para facilitar la administración de inyecciones i.v. Si le administran medicamentos por vía oral, asegúrese de preguntar a su equipo de atención de la salud cómo conservarlos y manejarlos en forma segura.

Los tipos de terapias sistémicas que se usan para un tumor cerebral incluyen los siguientes:

  • Quimioterapia

  • Terapia dirigida

Cada uno de estos tipos de terapias se analiza a continuación con más detalle. Una persona puede recibir 1 tipo de terapia sistémica por vez o una combinación de terapias sistémicas al mismo tiempo. También se pueden administrar como parte de un plan de tratamiento que puede incluir cirugía o radioterapia.

Los medicamentos utilizados para tratar un tumor cerebral se evalúan constantemente. Con frecuencia, hablar con su médico es la mejor forma de obtener información sobre los medicamentos que le recetaron, su finalidad y sus potenciales efectos secundarios o interacciones con otros medicamentos.

También es importante informar a su médico si está tomando algún otro medicamento con receta o de venta libre, o suplementos. Las hierbas, los suplementos y otros fármacos pueden interactuar con los medicamentos que se usan para tratar tumores cerebrales. Obtenga más información sobre sus medicamentos recetados en las bases de datos de fármacos en las que se pueden realizar búsquedas (en inglés).

Quimioterapia

La quimioterapia es el uso de fármacos para destruir las células tumorales, generalmente al evitar que las células tumorales crezcan, se dividan y produzcan más células.

Un régimen o programa de quimioterapia, por lo general consiste en una cantidad específica de ciclos que se administran durante un período determinado. Un paciente puede recibir 1 fármaco por vez o una combinación de diferentes fármacos administrados al mismo tiempo. El objetivo de la quimioterapia puede ser destruir las células tumorales que queden después de la cirugía, retardar el crecimiento del tumor o disminuir los síntomas.

Como se explicó anteriormente, la quimioterapia para tratar un tumor cerebral se suele administrar después de la cirugía y posiblemente con o después de la radioterapia, en especial si el tumor ha regresado después del tratamiento inicial.

Algunos fármacos atraviesan mejor la barrera hematoencefálica. Estos son los fármacos que se usan a menudo para tratar un tumor cerebral.

  • Las obleas de Gliadel son una forma de administrar el fármaco carmustina. Estas obleas se colocan en la zona en la que se extirpó el tumor durante la cirugía.

  • Para las personas con glioblastoma y glioma de alto grado, el último estándar de atención es la radioterapia con temozolomida (Temodar) en dosis bajas diarias. A esto le siguen dosis mensuales de temozolomida después de la radioterapia durante 6 meses a 1 año.

  • Se ha utilizado una combinación de 3 fármacos, lomustina (Gleostine), procarbazina (Matulane) y vincristina (Vincasar), junto con radioterapia. Este enfoque ha ayudado a prolongar las vidas de los pacientes con oligodendroglioma de grado III con una codeleción de 1p/19q (consulte también “Características moleculares” en la sección Grados y factores pronósticos) cuando se administra antes o justo después de la radioterapia. También se ha demostrado que alarga la vida de los pacientes después de la radioterapia para un tumor de bajo grado que no se pudo extirpar por completo con cirugía. Se están realizando ensayos clínicos sobre el uso de quimioterapia para retrasar la radioterapia en pacientes con glioma de bajo grado.

Los pacientes son monitoreados con una RM cada 2 a 3 meses mientras reciben tratamiento activo. Luego, el tiempo transcurrido entre las exploraciones por RM aumenta en función del grado del tumor. A menudo, los pacientes se someten a RM regulares para monitorear su salud después de finalizar el tratamiento, y si el tumor no ha crecido. Si el tumor crece durante el tratamiento, se tendrán en cuenta otras opciones de tratamiento.

Los efectos secundarios de la quimioterapia dependen del paciente y de la dosis utilizada, pero pueden incluir fatiga, riesgo de infección, náuseas y vómitos, caída del cabello, pérdida del apetito y diarrea. Estos efectos secundarios generalmente desaparecen después de finalizado el tratamiento. Con mucha menor frecuencia, determinados fármacos pueden causar sordera parcial. Otros pueden causar daño renal. Es posible que se administre líquido adicional por vía i.v. para proteger los riñones.

Obtenga más información sobre los aspectos básicos de la quimioterapia.

Terapia dirigida

Además de la quimioterapia estándar, la terapia dirigida es otra forma en que los médicos usan los fármacos para tratar el cáncer. La terapia dirigida es un tratamiento que actúa sobre los genes o las proteínas específicos del tumor o las condiciones del tejido que contribuyen al crecimiento y la supervivencia del tumor. Este tipo de tratamiento bloquea el crecimiento y la diseminación de las células tumorales y limita el daño a las células sanas.

No todos los tumores tienen los mismos objetivos y algunos tumores pueden tener más de 1 objetivo. Para determinar cuál es el tratamiento más eficaz, el médico puede realizar pruebas para identificar los genes, las proteínas y otros factores involucrados en el tumor. Esto ayuda a que los médicos puedan encontrar el tratamiento más eficaz que mejor se adapte a cada paciente, siempre que sea posible. Además, continúan realizándose estudios de investigación para obtener más información sobre objetivos moleculares específicos y tratamientos nuevos dirigidos a ellos. Obtenga más información sobre los aspectos básicos de los tratamientos dirigidos.

Para un tumor cerebral, existen 2 tipos de terapia dirigida que se pueden usar:

  • Bevacizumab (Avastin, Mvasi) es una terapia antiangiogénesis (en inglés) que se usa para tratar el glioblastoma multiforme cuando el tratamiento previo no ha funcionado. La terapia antiangiogénica tiene como objetivo detener la angiogénesis, que es el proceso de formación de vasos sanguíneos nuevos. Dado que el tumor necesita los nutrientes transportados por los vasos sanguíneos para crecer y diseminarse, el objetivo de la terapia antiangiogénica es “matar de hambre” al tumor.

  • Larotrectinib (Vitrakvi) y entrectinib (Rozlytrek) son unos tipos de terapia dirigida que no son específicos para un determinado tipo de tumor, pero se concentran en un cambio genético específico denominado fusión NTRK. Este tipo de cambio genético se encuentra en una serie de tumores, incluidos algunos tumores cerebrales. Está aprobado como tratamiento para algunos tumores cerebrales que son metastásicos o que no se pueden extirpar con cirugía y empeoraron con otros tratamientos.

Se está investigando una variedad de otras terapias dirigidas para tumores cerebrales que continenen otros cambios moleculares específicos, como mutaciones IDH, mutaciones BRAF y fusiones FGFR. Hable con su médico acerca de los posibles efectos secundarios de un medicamento específico y cómo se pueden manejar.

Terapia de campo eléctrico alterno (campos de tratamiento de tumores)

Este tipo de tratamiento utiliza un dispositivo portátil no invasivo que interfiere con las partes de una célula que se necesitan para que las células tumorales crezcan y se diseminen. Se administra colocando electrodos que producen un campo eléctrico en el exterior de la cabeza de una persona. El dispositivo disponible se llama Optune.

La terapia de campo eléctrico alterno puede ser una opción para las personas con diagnóstico reciente de glioblastoma o para aquellas con glioblastoma recurrente. Los investigadores han descubierto que las personas con glioblastoma recurrente que usaron el dispositivo vivieron tanto como las que recibieron quimioterapia. Además, presentaron menos efectos secundarios. Otras investigaciones muestran que las personas con diagnóstico reciente de glioblastoma vivieron más tiempo y tenían menos probabilidades de que la enfermedad empeorara cuando se usó este tratamiento con temozolomida después de la radioterapia. Este enfoque de tratamiento se considera ahora una opción recomendada para el glioblastoma.

Remisión y probabilidad de recurrencia

Una remisión se produce cuando el tumor no puede detectarse en el cuerpo. Una remisión puede ser temporal o permanente.

Para la mayoría de los tumores cerebrales primarios, a pesar de que las pruebas de imagen muestran que el crecimiento del tumor está controlado o que no hay signos visibles de un tumor, es común que el tumor cerebral recurra.

A menudo, los pacientes continuarán sometiéndose a las RM para detectar una recurrencia. Esta incertidumbre hace que a muchas personas les preocupe que el tumor regrese. Es importante hablar con su médico sobre la posibilidad de que el tumor regrese. Comprender su riesgo de recurrencia y las opciones de tratamiento puede ayudar a que usted se sienta más preparado si, en efecto, el tumor regresa. Obtenga más información sobre cómo sobrellevar el temor a la recurrencia.

Si el tumor regresa después del tratamiento original, se denomina tumor recurrente. Por lo general, un tumor cerebral recurrente vuelve cerca de donde empezó originalmente. En raras ocasiones, puede volver en otro lugar o en varias áreas, lo que se denomina recurrencia multifocal.

Cuando esto sucede, comenzará un nuevo ciclo de pruebas para obtener la mayor cantidad de información posible sobre la recidiva. Después de realizadas estas pruebas, usted y su médico hablarán sobre sus opciones de tratamiento. A menudo, el plan de tratamiento incluirá los tratamientos descritos anteriormente, como por ejemplo, cirugía, radioterapia, quimioterapia y terapia dirigida, pero quizá se combinen de un modo diferente o se administren con una frecuencia diferente. Las opciones pueden incluir las siguientes:

  • Temozolomida

  • Bevacizumab

  • Terapia de campo eléctrico alterno para personas con glioma de alto grado recurrente

  • Ensayos clínicos que estudian nuevos tratamientos

No existe un enfoque individual para tratar un tumor cerebral recurrente y su plan de tratamiento se basará en muchos factores. Sea cual sea el plan de tratamiento que usted elija, los cuidados paliativos serán importantes para aliviar los síntomas y los efectos secundarios. Su médico puede sugerir ensayos clínicos de nuevos fármacos que se están creando y probando para tratar tumores cerebrales que pueden ayudar con los tumores recurrentes. Muchos de estos nuevos fármacos se denominan “terapias moleculares dirigidas” porque son de tamaño pequeño, lo que significa que se pueden tomar por vía oral o pueden dirigirse a partes específicas de las células del tumor cerebral (consulte Terapia dirigida, anteriormente). Estos nuevos fármacos se están probando solos o en combinación con la quimioterapia estándar. Obtenga más información acerca de los ensayos clínicos sobre el tratamiento de tumores cerebrales en la sección Últimas investigaciones.

Las personas con un tumor cerebral recurrente a menudo sienten emociones como incredulidad o temor. Es recomendable que hable con su equipo de atención médica respecto de estos sentimientos y que solicite servicios de apoyo que lo ayuden a sobrellevar la situación. También puede ser útil hablar con otros pacientes, incluso a través de un grupo de apoyo. Obtenga más información sobre cómo afrontar una recurrencia.

Cáncer metastásico

Si el cáncer se disemina a otra parte del cuerpo desde el lugar donde se originó, los médicos lo denomina cáncer metastásico. Si esto sucede, es una buena idea hablar con médicos que tienen experiencia en tratarlo. Los médicos pueden tener opiniones diferentes sobre el mejor plan de tratamiento estándar. Los ensayos clínicos también pueden ser una opción. Obtenga más información sobre la búsqueda de una segunda opinión antes de comenzar el tratamiento, a fin de estar tranquilo con el plan de tratamiento elegido.

Para la mayoría de las personas, un diagnóstico de cáncer metastásico es muy estresante y difícil. Se alienta a usted y a su familia a que hablen sobre cómo se sienten con los médicos, el personal de enfermería, los trabajadores sociales u otros integrantes del equipo de atención médica. También puede ser útil hablar con otros pacientes, incluso a través de un grupo de apoyo o otro grupo de apoyo entre pares.

Su plan de tratamiento puede incluir una combinación de cirugía, radioterapia, terapia dirigida e inmunoterapia, que es un tipo de tratamiento diseñado para estimular las defensas naturales del organismo para combatir el tumor. Obtenga más información sobre la inmunoterapia a continuación y en la sección Últimas investigaciones de esta guía.

Tratamiento de las metástasis cerebrales

Si el cáncer se disemina al cerebro desde otra parte del cuerpo, se llama metástasis cerebral, cáncer metastásico, o un tumor cerebral secundario. Las metástasis cerebrales han sido tratadas tradicionalmente con cirugía o radioterapia. La quimioterapia no se utiliza con frecuencia porque la barrera hematoencefálica impide que muchos fármacos lleguen al cerebro. En el pasado, la quimioterapia se usaba principalmente solo si la radioterapia no funcionaba. Las opciones actuales para tratar las metástasis cerebrales incluyen:

  • Cirugía. La cirugía suele ser solo una opción para los pacientes que tienen una sola área de cáncer en el cerebro. A menudo se administra radioterapia después.

  • Radioterapia. La radioterapia de todo el cerebro es la radioterapia que se administra a todo el cerebro. A veces, los médicos pueden evitar dañar una parte del cerebro llamada “hipocampo”. Esto ayuda a reducir los efectos secundarios cognitivos asociados a la radioterapia. La radioterapia en dosis elevadas se puede administrar mediante técnicas estereotácticas (consulte Radioterapia, anteriormente) que centran la radiación solo en el tumor del cerebro, lo que también puede ayudar a disminuir los efectos secundarios. Este método funciona muy bien para deshacerse de los tumores existentes, pero puede que no impida que se desarrollen nuevos tumores.

  • Terapia dirigida. Algunos tipos de terapia dirigida pueden ingresar fácilmente al cerebro y pueden apuntar a cambios genéticos específicos en el tumor. Estas incluyen las siguientes:

    • Osimertinib (Tagrisso) para el cáncer de pulmón de células no pequeñas que tiene un cambio genético en el gen EGFR

    • Alectinib (Alecensa) para el NSCLC con un cambio genético en el gen ALK

    • Lapatinib (Tykerb) se puede usar para el cáncer de mama HER2-positivo

    • Dabrafenib (Tafinlar) solo o junto con trametinib (Mekinist) y vemurafenib (Zelboraf) para el melanoma

  • Inmunoterapia. Algunos tipos de inmunoterapia han mostrado ser prometedores en el tratamiento de metástasis cerebrales de cáncer de pulmón y melanoma. Estos incluyen ipilimumab (Yervoy), nivolumab (Opdivo) y pembrolizumab (Keytruda). La inmunoterapia es otro tipo de terapia que utiliza medicamentos. Obtenga más información sobre la inmunoterapia en la sección Últimas investigaciones de esta guía.

Tratamiento de las metástasis leptomeníngeas

Si el cáncer se disemina a las meninges o al LCR, se llama metástasis leptomeníngea. Las personas con metástasis leptomeníngeas pueden recibir quimioterapia administrada directamente en el LCR del cerebro. Esto se puede hacer con una punción lumbar, llamada quimioterapia intratecal. O se puede administrar usando un catéter con un reservorio, llamado reservorio Ommaya. La radioterapia también puede ser una opción.

Manejo de los síntomas y efectos secundarios de las metástasis cerebrales

Los síntomas de las metástasis cerebrales dependerán de dónde se haya diseminado el cáncer, de la cantidad de cáncer que hay en el cerebro y de la rapidez con la que se propaga.

El alivio de los síntomas y de los efectos secundarios de una persona es un aspecto importante de la atención del cáncer. El tratamiento de los síntomas puede continuar incluso después de finalizar el tratamiento para curar o retrasar el crecimiento del cáncer. Asegúrese de hablar con el equipo de atención médica acerca de nuevos síntomas o cambios en los síntomas existentes.

La American Society of Clinical Oncology recomienda las siguientes opciones para ayudar a aliviar los síntomas de las metástasis cerebrales:

  • Dexametasona (disponible como fármaco genérico), un tipo de fármaco llamado corticoesteroide, para reducir la inflamación del cerebro y ayudar a mejorar los síntomas neurológicos causados por el tumor y la inflamación en el tejido cerebral sano.

  • Los medicamentos anticonvulsivos solo se recomiendan para las personas que tienen convulsiones.

Obtenga más información sobre otras opciones para ayudar a controlar los síntomas de las metástasis cerebrales.

Esta información se basa en la aprobación de la American Society of Clinical Oncology de recomendaciones sobre el uso de medicamentos anticonvulsivos y esteroides para tumores cerebrales metastásicos del Congreso de Cirujanos Neurológicos. Tenga en cuenta que este enlace lo llevará a otro sitio web en inglés de la American Society of Clinical Oncology.

Si el tratamiento no funciona

Recuperarse de un tumor cerebral no siempre es posible. Si el tumor no se puede curar o controlar, a la enfermedad se la puede denominar avanzada o terminal.

Este diagnóstico es estresante y, para algunas personas, hablar sobre un tumor cerebral avanzado resulta difícil. Sin embargo, es importante que mantenga conversaciones abiertas y sinceras con su equipo de atención médica a fin de expresar sus sentimientos, preferencias e inquietudes. El equipo de atención médica tiene habilidades especiales, experiencia y conocimientos para brindar apoyo a los pacientes y a sus familiares, y está aquí para ayudar. Es extremadamente importante asegurarse de que una persona se sienta físicamente cómoda, que no tenga dolor y que reciba apoyo emocional.

Es posible que las personas con un tumor cerebral avanzado y con una expectativa de vida inferior a 6 meses quieran considerar los cuidados para enfermos terminales. Los cuidados para enfermos terminales están pensados para proporcionar la mejor calidad de vida posible para las personas que están cerca de la etapa final de la vida. Es recomendable que usted y su familia hablen con el equipo de atención médica respecto a las opciones de cuidados para enfermos terminales, que incluyen cuidados domiciliarios para enfermos terminales, cuidados en un hospital de cuidados paliativos u otros lugares de atención médica. El cuidado de enfermería y los equipos especiales pueden hacer que permanecer en el hogar sea una opción factible para muchas familias. Obtenga más información sobre la planificación de la atención avanzada.

Después de la muerte de un ser querido, muchas personas necesitan apoyo para ayudarlas a sobrellevar la pérdida. Obtenga más información sobre sufrimiento y pérdida.

La siguiente sección de esta guía es Acerca de los ensayos clínicos. Ofrece más información sobre los estudios de investigación que se centran en buscar mejores maneras de cuidar a las personas con un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Acerca de los ensayos clínicos

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará más información sobre los ensayos clínicos, los cuales son la principal forma en que se prueban enfoques médicos nuevos para averiguar qué tan bien funcionan. Use el menú para ver otras páginas.

¿Qué son los ensayos clínicos?

Los médicos y científicos siempre buscan mejores métodos para el tratamiento de las personas que padecen un tumor cerebral. Para realizar avances científicos, los médicos desarrollan estudios de investigación, que se denominan ensayos clínicos, en los que participan voluntarios. Todos los fármacos aprobados en la actualidad por la Food and Drug Administration (FDA, Administración de Alimentos y Medicamentos) de los EE. UU. se evaluaron en ensayos clínicos.

Los ensayos clínicos se usan para todos los tipos y estadios de tumores cerebrales. Muchos se centran en nuevos tratamientos para determinar si un tratamiento nuevo es seguro, eficaz y posiblemente mejor que los tratamientos ya existentes. Estos tipos de estudios evalúan fármacos nuevos, diferentes combinaciones de tratamientos, enfoques nuevos de radioterapia o cirugía, y métodos nuevos de tratamiento.

Las personas que participan en los ensayos clínicos pueden ser algunas de las primeras en recibir un tratamiento antes de que esté disponible para el público en general. Sin embargo, existen algunos riesgos en los ensayos clínicos, incluidos efectos secundarios posibles y la posibilidad de que el nuevo tratamiento no funcione. Se recomienda a las personas que hablen con su equipo de atención médica acerca de las ventajas y las desventajas de participar en un estudio en particular.

Algunos ensayos clínicos estudian nuevas formas de aliviar los síntomas y los efectos secundarios durante el tratamiento. Otros estudian cómo manejar los efectos tardíos que pueden presentarse mucho tiempo después del tratamiento. Hable con su médico sobre los ensayos clínicos en relación con los síntomas y los efectos secundarios.

La decisión de participar en un ensayo clínico

Las personas deciden participar en los estudios clínicos por muchos motivos. Para algunas, el ensayo clínico es la mejor opción de tratamiento disponible. Debido a que los tratamientos estándares no son perfectos, las personas a menudo están dispuestas a enfrentar el mayor grado de incertidumbre de un ensayo clínico con la esperanza de obtener un mejor resultado. Otras personas se presentan voluntariamente para participar en ensayos clínicos porque saben que estos estudios son una forma de contribuir con el progreso del tratamiento de un tumor cerebral. Aunque el ensayo clínico no los beneficie directamente, su participación puede beneficiar a futuros pacientes con un tumor cerebral.

La cobertura de seguro y los costos de los ensayos clínicos difieren según la ubicación y el estudio. En algunos programas, se reembolsan parte de los gastos generados al participar en el ensayo clínico. En otros, esto no sucede. Es importante hablar primero con el equipo de investigación y con su aseguradora para conocer si el tratamiento en un ensayo clínico se cubrirá y de qué forma. Obtenga más información sobre la cobertura de seguro médico de los ensayos clínicos.

En ocasiones, a las personas les preocupa que en un ensayo clínico no reciban tratamiento y, en su lugar, reciban un placebo o una “pastilla de azúcar”. Cuando se utilizan, los placebos normalmente se combinan con un tratamiento estándar en la mayoría de los ensayos clínicos sobre el cáncer. Siempre se informará a los participantes del estudio cuando se use un placebo en un estudio. Encuentre más información sobre el uso de placebos en ensayos clínicos sobre el cáncer (en inglés).

Seguridad del paciente y consentimiento informado

Para participar en un ensayo clínico, las personas deben participar en un proceso conocido como “consentimiento informado”. Durante el consentimiento informado, el médico debe hacer lo siguiente:

  • Describir todas las opciones de tratamiento, de modo que la persona comprenda de qué manera el tratamiento nuevo se diferencia del tratamiento estándar.

  • Enumerar todos los riesgos del tratamiento nuevo, que pueden o no ser diferentes de los riesgos del tratamiento estándar.

  • Explicar qué se requerirá de cada persona para participar en el ensayo clínico, incluidas la cantidad de visitas al médico, las pruebas y el programa del tratamiento.

  • Describir los fines del ensayo clínico y lo que los investigadores intentan saber.

Los ensayos clínicos también tienen ciertas reglas denominadas “requisitos de elegibilidad”, que ayudan a estructurar la investigación y mantener la seguridad de los pacientes. Usted y el equipo de investigación revisarán detenidamente estos requisitos.

Las personas que participan en un ensayo clínico pueden dejar de hacerlo en cualquier momento por motivos personales o médicos. Esto puede incluir el hecho de que el tratamiento nuevo no esté funcionando o se presenten efectos secundarios graves. Los ensayos clínicos también son monitoreados cuidadosamente por expertos que están atentos a cualquier problema en cada estudio. Es importante que las personas que participan en un ensayo clínico hablen con el médico y los investigadores acerca de quiénes serán los encargados de proporcionar tratamiento y atención durante el ensayo clínico, después de su finalización o en caso de que decidan retirarse del ensayo clínico antes de que este concluya.

Cómo buscar un ensayo clínico

Hay investigaciones en curso a través de ensayos clínicos para todo tipo de tumor. Si desea conocer más detalles sobre temas específicos que están en estudio con referencia a los tumores cerebrales, consulte la sección Últimas investigaciones.

Cancer.Net ofrece una gran cantidad de información sobre ensayos clínicos en otras áreas del sitio web, incluida una sección completa sobre ensayos clínicos y lugares para buscar ensayos clínicos sobre un tipo específico de tumor.

La siguiente sección de esta guía es Últimas investigaciones. Explica áreas de la investigación científica sobre los tumores cerebrales. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Últimas investigaciones

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: leerá acerca de la investigación científica que se está realizando para obtener más información sobre los tumores cerebrales y cómo tratarlos. Use el menú para ver otras páginas.

Los médicos están trabajando para obtener más información sobre los tumores cerebrales, cómo prevenirlos, cuál es el mejor tratamiento y cómo brindar los mejores cuidados a las personas a las que se les diagnosticó un tumor cerebral. Las siguientes áreas de investigación pueden incluir nuevas opciones para los pacientes a través de ensayos clínicos. Hable siempre con su médico sobre las opciones de diagnóstico y tratamiento más adecuadas para su caso.

  • Pruebas de imagen realzadas. Se están investigando nuevas técnicas para las exploraciones por imágenes. Estas pueden ayudar a los médicos a hacer un mejor seguimiento del funcionamiento del tratamiento y a observar la posible recurrencia o crecimiento del tumor.

  • Biomarcadores. Los investigadores examinan biomarcadores que pueden ayudar a diagnosticar un tumor cerebral, calcular el pronóstico de un paciente o predecir si un tratamiento específico puede funcionar. Un biomarcador es una sustancia que se encuentra en su sangre, orina o tejido corporal. Las pruebas de biomarcadores le brindan al médico más información sobre el cáncer.

  • Inmunoterapia. La inmunoterapia, también denominada terapia modificadora de la respuesta biológica, está diseñada para estimular las defensas naturales del cuerpo para combatir el tumor. Utiliza materiales producidos por el cuerpo o fabricados en un laboratorio para mejorar, identificar o restaurar la función del sistema inmunitario. Se están estudiando diferentes métodos para tumores cerebrales, como el uso de células dendríticas o el uso de vacunas dirigidas contra una molécula específica en la superficie de las células tumorales. Actualmente se están probando varios métodos en ensayos clínicos.

  • Viroterapia oncolítica. Esta terapia utiliza un virus que infecta y destruye las células tumorales, sin afectar las células cerebrales sanas. Actualmente, se está investigando como tratamiento para tumores cerebrales.

  • Terapia dirigida. Como se indica en Tipos de tratamiento, este tipo de tratamiento se dirige a genes o proteínas defectuosos que contribuyen al crecimiento y desarrollo de un tumor. Continúan las investigaciones sobre el uso de terapias para los tumores cerebrales que se dirigen a las diferentes formas en que crece un tumor, cómo se disemina un tumor y cómo se pueden destruir las células tumorales.

  • Interrupción de la barrera hematoencefálica. Esta técnica interrumpe temporalmente la barrera protectora natural del cerebro para permitir que la quimioterapia ingrese con más facilidad al cerebro desde el torrente sanguíneo.

  • Nuevos fármacos y combinaciones de fármacos. Los investigadores están estudiando el uso de fármacos actualmente disponibles para otros tipos de cáncer como tratamiento para un tumor cerebral. Además, se están explorando combinaciones de fármacos que se dirigen a las diferentes formas en que un tumor crece y se disemina. Dado que los tumores pueden desarrollar resistencia a la quimioterapia, lo que significa que el tratamiento deja de funcionar, otro enfoque es utilizar un tratamiento que se dirija a cómo las células tumorales desarrollan resistencia.

  • Terapia genética. Este tipo de terapia pretende sustituir o reparar genes anómalos que causen o ayuden al crecimiento del tumor.

  • Investigación genética. Los investigadores buscan más información sobre mutaciones génicas específicas y cómo se relacionan con el riesgo y el crecimiento de un tumor cerebral. En particular, The Cancer Genome Atlas Research Network (en inglés) es un gran esfuerzo continuo de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos para obtener más información sobre el vínculo entre la genética y el glioma. Los resultados recientes incluyen el descubrimiento de 3 mutaciones genéticas específicas que no se relacionan previamente con el glioblastoma: NF1, ERBB2, y PIK3R1. Otra investigación se centra en cómo el gen MGMT y las mutaciones del gen IDH se relacionan con los tumores cerebrales. Esta información es útil para los investigadores y, en última instancia, puede llevar a avances en el diagnóstico y tratamiento del glioma. Se están explorando enfoques de medicina de precisión que se dirigen a mutaciones específicas de tumores.

  • Cuidados paliativos/atención médica de apoyo. Se están realizando ensayos clínicos para encontrar mejores métodos para reducir los síntomas y los efectos secundarios de los tratamientos actuales para los tumores cerebrales, para mejorar el bienestar y la calidad de vida de los pacientes.

¿Desea obtener más información sobre las últimas investigaciones?

Si desea obtener información adicional sobre las áreas de investigación más recientes sobre los tumores cerebrales, explore estos temas relacionados que lo llevarán fuera de esta guía:

La siguiente sección de esta guía es Cómo sobrellevar el tratamiento. Ofrece orientación sobre cómo sobrellevar los cambios físicos, emocionales, sociales y económicos que un tumor cerebral y su tratamiento pueden ocasionar. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Cómo sobrellevar el tratamiento

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: obtendrá más información sobre cómo sobrellevar los efectos físicos, emocionales, sociales y financieros de un tumor cerebral y su tratamiento. Use el menú para ver otras páginas.

Cada tratamiento para un tumor cerebral puede provocar efectos secundarios o cambios en su cuerpo y en cómo se siente. Por muchos motivos, las personas no experimentan los mismos efectos secundarios, incluso cuando reciben el mismo tratamiento contra el mismo tipo de tumor. Esto puede hacer que sea difícil predecir cómo se sentirá durante el tratamiento.

Cuando se prepara para iniciar el tratamiento es normal sentir temor a los efectos secundarios relacionados con el tratamiento. Puede ser útil saber que su equipo de atención médica se esforzará por prevenir y aliviar los efectos secundarios. Esta parte del tratamiento se llama "cuidados paliativos" o "atención de apoyo". Es una parte importante de su plan de tratamiento, independientemente de su edad o del estadio de la enfermedad.

Cómo sobrellevar los efectos secundarios físicos

Los efectos secundarios físicos frecuentes de cada opción de tratamiento para un tumor cerebral se describen en la sección Tipos de tratamiento. Obtenga más información sobre los efectos secundarios de un tumor cerebral y su tratamiento, junto con las formas de prevenirlos o controlarlos. Los cambios en su salud física dependen de varios factores, incluidos la ubicación y el grado del tumor, la duración y la dosis del tratamiento, y su estado de salud general.

Hable con su equipo de atención médica con regularidad sobre cómo se siente. Es importante que le informe al equipo sobre cualquier efecto secundario nuevo o cambio en los efectos secundarios existentes. Si su equipo de atención médica sabe cómo se siente, podrá encontrar maneras de aliviar o manejar los efectos secundarios para ayudarlo a sentirse más cómodo y, posiblemente, evitar que los efectos secundarios empeoren.

Puede ser útil llevar un registro de sus efectos secundarios de manera que sea más fácil explicarle cualquier cambio a su equipo de atención médica. Obtenga más información sobre por qué es útil llevar un registro de los efectos secundarios.

A veces, los efectos secundarios físicos pueden permanecer después de terminado el tratamiento. Los médicos los denominan efectos secundarios a largo plazo. Los efectos secundarios que suceden meses o años después del tratamiento se denominan efectos tardíos. El tratamiento de los efectos secundarios a largo plazo y los efectos tardíos es una parte importante de la atención de sobrevivencia. Para obtener más información, lea la sección Atención de seguimiento de esta guía o hable con su médico.

Cómo sobrellevar los efectos emocionales y sociales

Usted puede experimentar efectos emocionales y sociales después de recibir un diagnóstico de tumor cerebral. Estos pueden incluir sobrellevar una variedad de emociones, como la tristeza, la ansiedad o el enojo, o manejar su nivel de estrés. A veces, para las personas es difícil expresar a sus seres queridos cómo se sienten. Para algunas, hablar con un trabajador social oncológico, un asesor o un miembro del clero puede ayudarlas a desarrollar formas más eficaces de sobrellevar un tumor cerebral y hablar sobre él.

Se alienta a los pacientes y a sus familiares a compartir sus sentimientos con un integrante del equipo de atención médica. Usted también puede encontrar estrategias para sobrellevar los efectos emocionales y sociales en una sección diferente de este sitio web. Esta sección incluye muchos recursos para buscar apoyo e información para satisfacer sus necesidades.

Sobrellevar los costos de la atención oncológica

El tratamiento de un tumor cerebral puede ser costoso. Puede generar estrés y ansiedad en los pacientes y sus familias. Además de los costos del tratamiento, muchas personas descubren que tienen gastos adicionales y no previstos en relación con su atención. A algunas personas, el alto costo de la atención médica les impide seguir o completar su plan de tratamiento. Esto puede poner en riesgo su salud y generar mayores costos en el futuro. Se alienta a los pacientes y a sus familias a que hablen acerca de sus inquietudes económicas con un integrante del equipo de atención médica. Obtenga más información sobre cómo manejar las consideraciones económicas en una parte diferente de este sitio web.

Cómo superar los obstáculos en la atención

Diferentes grupos de personas experimentan diferentes tasas de nuevos casos de cáncer y diferentes resultados con respecto a su cáncer. Estas diferencias se denominan “disparidades del cáncer”. Las disparidades son causadas, en parte, por obstáculos reales que impiden recibir una atención médica de calidad y, con más frecuencia, afectan negativamente a las minorías raciales y étnicas (en inglés), a las personas pobres, a las minorías sexuales y de género (LGBTQ+), a las poblaciones de adolescentes y adultos jóvenes, a los adultos mayores, y a las personas que viven en zonas rurales u otras comunidades desfavorecidas (en inglés).

Si tiene dificultades para obtener la atención que necesita, hable con un miembro de su equipo de atención de la salud o explore otros recursos que ayudan a apoyar a las personas con carencia de servicios médicos (en inglés).

Cuidar a un ser querido con un tumor cerebral

Los familiares y los amigos en ocasiones desempeñan un papel importante en el cuidado de una persona con un tumor cerebral. Estas personas reciben el nombre de cuidadores. Los cuidadores pueden proporcionar apoyo físico, práctico y emocional al paciente, incluso si viven lejos. Ser un cuidador también puede ser estresante y desafiante emocionalmente. Una de las tareas más importantes para los cuidadores es cuidarse a sí mismos.

Los pacientes con un tumor cerebral suelen necesitar mucha asistencia en casa. Es posible que muchos pacientes no sean capaces de realizar actividades importantes para su atención, como conducir hacia y desde las citas. Y algunos pueden necesitar arreglos de vivienda modificados para adaptarse a los desafíos físicos. Esto significa que los cuidadores pueden tener diversas responsabilidades diarias, o según sea necesario, que incluyen las siguientes:

  • Proporcionar apoyo y aliento

  • Hablar con el equipo de atención médica

  • Administrar medicamentos

  • Ayudar a controlar los síntomas y los efectos secundarios del tumor y el tratamiento

  • Coordinar las citas médicas

  • Proporcionar transporte

  • Asistir con las comidas

  • Ayudar con las tareas domésticas

  • Manejar asuntos del seguro y la facturación

  • Anticipar los cambios en el estado de ánimo, la personalidad y el pensamiento y saber cómo afrontar mejor estos cambios

Un plan para el cuidador puede ayudar a los cuidadores a mantenerse organizados y a identificar oportunidades para delegar tareas a otras personas. Puede resultar útil preguntar al equipo de atención de la salud cuánta atención se necesitará en el hogar y con las tareas diarias durante y después del tratamiento. Utilice esta hoja informativa de 1 página (en inglés) para ayudar a elaborar un plan de acción para el cuidador. Esta hoja informativa gratuita está disponible en formato PDF, de manera que es fácil de imprimir.

Obtenga más información sobre el cuidado o lea la Guía de ASCO Answers para cuidar de un ser querido en español o en inglés.

Cómo hablar con su equipo de atención médica sobre los efectos secundarios

Hable con su médico acerca de los efectos secundarios posibles antes de comenzar el tratamiento. Pregunte lo siguiente:

  • ¿Qué efectos secundarios son los más probables?

  • ¿Cuándo es probable que se produzcan?

  • ¿Qué podemos hacer para prevenirlos o aliviarlos?

Asegúrese de contarle a su equipo de atención médica sobre cualquier efecto secundario que se produzca durante el tratamiento y también después de este. Cuéntele incluso si no le parece que los efectos secundarios sean graves. Esta charla debería incluir los efectos físicos, emocionales, sociales y económicos.

¿Desea obtener más información sobre cómo llevar un registro de los efectos secundarios?

Cancer.Net Mobile: Mis Síntomas

Cancer.Net ofrece varios recursos para ayudarlo a llevar un registro de sus síntomas y efectos secundarios. Tenga en cuenta que estos enlaces lo llevan a otras secciones de Cancer.Net:

  • Cancer.Net Mobile: la aplicación móvil de Cancer.Net gratuita le permite registrar de manera segura el momento y la gravedad de los síntomas y efectos secundarios.

  • Manejo del dolor de ASCO Answers: obtenga este cuadernillo de 38 páginas sobre la importancia del alivio del dolor, que incluye una hoja de seguimiento del dolor a fin de ayudar a los pacientes a registrar cómo los afecta el dolor. El cuadernillo gratuito está disponible en PDF, de manera que es fácil de imprimir.

  • Hojas de datos de ASCO Answers: Lea las hojas informativas de 1 página sobre ansiedad y depresión (en inglés), estreñimiento (en inglés), diarrea y erupción (en inglés) que incluyen una hoja de seguimiento para registrar el momento y la gravedad del efecto secundario. Estas hojas informativas gratuitas están disponibles en PDF, de manera que son fáciles de imprimir.

La siguiente sección de esta guía es Atención de seguimiento. Explica la importancia de los controles médicos una vez terminado el tratamiento de un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Atención de seguimiento

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: leerá acerca de su atención médica después de finalizar el tratamiento de un tumor cerebral y la importancia de este tipo de atención de seguimiento. Use el menú para ver otras páginas.

La atención de las personas que tienen un diagnóstico de un tumor cerebral no finaliza cuando ha terminado el tratamiento activo. Su equipo de atención médica seguirá verificando que el tumor no haya regresado, manejará cualquier efecto secundario y monitoreará su salud general. Esto se denomina atención de seguimiento.

Su atención de seguimiento puede incluir exámenes físicos regulares, pruebas médicas o ambas cosas. Los médicos querrán hacer un seguimiento de su recuperación durante los meses y años venideros. Es muy probable que muchos tumores cerebrales recurran (o regresen), por lo que debería controlarse de forma rutinaria para detectar nuevos síntomas y con exploraciones por RM regulares. La frecuencia con la que programe las visitas de seguimiento y las exploraciones depende del tipo de tumor y otros factores, por lo que su equipo de atención médica hablará con usted sobre su programa exacto. También se puede recomendar la rehabilitación del cáncer (consulte “Manejo de los efectos secundarios a largo plazo y tardíos” a continuación).

Obtenga más información sobre la importancia de la atención de seguimiento.

Detectar una recurrencia

Un objetivo de la atención de seguimiento es controlar si hay una recurrencia, que significa que el tumor ha regresado. Un tumor vuelve a aparecer porque algunas áreas pequeñas de células tumorales pueden permanecer sin detectarse en el cuerpo. Con el tiempo, la cantidad de estas células puede incrementarse hasta que se muestran en los resultados de las pruebas o causan signos o síntomas.

Durante el control de seguimiento, un médico familiarizado con sus antecedentes médicos puede brindarle información personalizada sobre su riesgo de recidiva. Su médico le hará preguntas específicas sobre su salud. A algunas personas se les pueden realizar análisis de sangre o pruebas por imágenes como parte de su atención de seguimiento habitual, pero las recomendaciones sobre las pruebas dependen de varios factores, incluidos el tipo y grado del tumor diagnosticado inicialmente y los tipos de tratamiento proporcionados.

La anticipación antes de someterse a una prueba de seguimiento o esperar los resultados de una prueba puede aumentar su estrés o el de un familiar. Esto a veces se llama “ansiedad ante las pruebas”. Obtenga más información sobre cómo sobrellevar este tipo de estrés.

Cómo manejar los efectos secundarios a largo plazo y tardíos

La mayoría de las personas esperan tener efectos secundarios cuando reciben un tratamiento. Sin embargo, con frecuencia es sorprendente para los supervivientes que algunos efectos secundarios puedan persistir después del período de tratamiento. Estos efectos se denominan efectos secundarios a largo plazo. Otros efectos secundarios denominados efectos tardíos pueden desarrollarse meses o incluso años después. Los efectos a largo plazo y tardíos pueden incluir tanto cambios físicos como emocionales.

Hable con su médico sobre el riesgo de presentar dichos efectos secundarios según el tipo de tumor, su plan de tratamiento individual y su salud general. Si le realizaron un tratamiento del cual se sabe que causa efectos tardíos específicos, es posible que se le realicen determinados exámenes físicos, exploraciones o análisis de sangre para ayudar a identificarlos y manejarlos.

Tal como se describe en las secciones anteriores, un tumor cerebral y su tratamiento pueden afectar la función del cerebro y su bienestar general. Por este motivo, es importante que su equipo de atención médica evalúe su calidad de vida y sus capacidades cognitivas y funcionales a través de pruebas especializadas. Por lo general, estas pruebas las realiza un neuropsicólogo. Un neuropsicólogo es un psicólogo que tiene formación especial en la capacidad y los comportamientos del cerebro.

Estas evaluaciones podrían identificar situaciones en las que las terapias de rehabilitación específicas serían útiles. Las opciones para la terapia de rehabilitación incluyen:

  • Terapia del habla

  • Terapia ocupacional

  • Asesoramiento con un trabajador social

  • Medicamentos para reducir la fatiga o mejorar la memoria

  • Pruebas neuropsicológicas, que examinan los cambios conductuales y mentales del tumor y su tratamiento

El objetivo de la rehabilitación es ayudar a la persona a recobrar el control sobre muchos aspectos de la vida y a permanecer tan independiente y productiva como sea posible. Obtenga más información sobre la rehabilitación.

Mantenimiento de registros de salud personales

Usted y su médico deben trabajar en conjunto para desarrollar un plan de atención de seguimiento personalizado. Asegúrese de consultar sobre cualquier inquietud que tenga en relación con su salud física o emocional futura. La American Society of Clinical Oncology ofrece formularios para ayudar a llevar un registro del tratamiento que recibió y desarrollar un plan de atención de sobrevivencia (en inglés) al finalizar el tratamiento.

Este también es un buen momento para hablar con su médico sobre quién dirigirá su atención de seguimiento. Algunos supervivientes siguen viendo al especialista, mientras que otros vuelven a la atención del médico general u otro profesional de atención médica. Esta decisión depende de varios factores, incluidos el tipo y el grado del tumor, los efectos secundarios, las normas del seguro médico y sus preferencias personales.

Si un médico que no participó directamente en su atención dirigirá el control de seguimiento, asegúrese de compartir con él el resumen del tratamiento y los formularios del plan de atención de sobrevivencia, así como con todos los proveedores de atención médica futuros. Los detalles sobre el tratamiento de su tumor cerebral son muy valiosos para los profesionales de atención médica que cuidarán de usted durante toda su vida.

La siguiente sección de esta guía es Sobrevivencia. Describe cómo sobrellevar los desafíos cotidianos que se plantean después del diagnóstico de un tumor cerebral. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Sobrevivencia

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: leerá acerca de cómo sobrellevar los desafíos cotidianos después de un diagnóstico de tumor cerebral. Use el menú para ver otras páginas.

¿Qué es la sobrevivencia?

La palabra “sobrevivencia” significa distintas cosas para diferentes personas. Las definiciones frecuentes incluyen lo siguiente:

  • No tener signos del tumor luego de haber finalizado el tratamiento.

  • Vivir con, a través y más allá del diagnóstico. Según esta definición, la sobrevivencia comienza en el momento del diagnóstico y continúa durante el tratamiento y durante el resto de la vida de una persona.

La sobrevivencia puede ser una parte complicada de tener un tumor. Se debe a que es diferente para cada persona.

Para algunas personas, incluso el término “sobrevivencia” no les parece adecuado y prefieren utilizar un lenguaje diferente para describir y definir su experiencia. En ocasiones se utilizará un tratamiento prolongado durante meses o años para manejar o controlar un tumor. Vivir con un tumor cerebral indefinidamente no es fácil, y el equipo de atención de la salud puede ayudarle a manejar los desafíos que ello implica (en inglés). Cada uno tiene que encontrar su propio camino para nombrar y explorar los cambios y los desafíos que surgen como resultado de su diagnóstico y tratamiento.

Los sobrevivientes pueden experimentar una mezcla de sensaciones, incluidas la alegría, la preocupación, el alivio, la culpa y el miedo. Algunas personas dicen que aprecian más la vida después de haber recibido un diagnóstico y que han logrado una mayor aceptación de ellas mismas. Otras se vuelven muy ansiosas respecto a la salud y sienten incertidumbre en cuanto a cómo sobrellevar la vida cotidiana. Los sentimientos de temor y ansiedad seguirán apareciendo a medida que pasa el tiempo, pero estas emociones no deberían ser una constante en su vida diaria. Si persisten, asegúrese de hablar con un miembro de su equipo de atención de la salud.

Cuando las visitas frecuentes al equipo de atención médica finalizan después de terminar el tratamiento, los sobrevivientes pueden sentir algo de estrés. A menudo, las relaciones generadas con el equipo médico brindan una sensación de seguridad durante el tratamiento, y las personas extrañan este tipo de apoyo. Esto puede ser especialmente cierto cuando aparecen preocupaciones y desafíos nuevos con el tiempo, como cualquier efecto tardío del tratamiento, desafíos emocionales, incluidos el miedo a la recurrencia, problemas relacionados con la sexualidad y la fertilidad, y problemas económicos y del lugar de trabajo.

Cada superviviente tiene inquietudes y desafíos individuales. Ante cualquier desafío, un buen primer paso es ser capaz de reconocer los miedos y hablar sobre ellos. Para sobrellevar con eficacia una situación se requiere:

  • Entender el desafío al que se enfrenta.

  • Pensar en soluciones.

  • Pedir y permitir el apoyo de otros.

  • Sentirse a gusto con el curso de acción que eligió seguir.

Siempre que sea posible, se recomienda participar en un grupo de apoyo con otras personas a las que les hayan diagnosticado tumores cerebrales. Esto les permite hablar con personas que han tenido experiencias personales similares. Otras opciones para buscar apoyo incluyen hablar con un amigo o con un integrante de su equipo de atención médica, obtener asesoramiento individual o pedir asistencia en el centro de recursos de aprendizaje del lugar en donde recibió tratamiento.

El papel cambiante de los cuidadores

Los familiares y amigos también pueden atravesar períodos de transición. Un cuidador desempeña un papel muy importante en cuanto a brindar apoyo a una persona a la que le diagnosticaron un tumor cerebral y brindar atención física, emocional y práctica todos los días o según sea necesario. Muchos cuidadores se centran en brindar este apoyo, especialmente si el período de tratamiento dura muchos meses o un tiempo más prolongado.

No obstante, cuando se completa el tratamiento, el rol del cuidador generalmente cambia. Finalmente, la necesidad de tener un cuidador relacionado con el diagnóstico se vuelve mucho menor o llega a su fin. Los cuidadores también pueden obtener más información sobre cómo adaptar su vida después de haber sido un cuidador.

Una perspectiva nueva sobre su salud

Para muchas personas, la sobrevivencia es una gran motivación para realizar cambios en el estilo de vida.

Se alienta a que las personas que se recuperan de un tumor cerebral sigan pautas establecidas para tener una buena salud, como ser no fumar, limitar el alcohol, alimentarse bien y manejar el estrés. La actividad física regular puede ayudarlo a recobrar su fuerza y nivel de energía. El equipo de atención médica puede ayudarlo a diseñar un plan de ejercicios adecuado según sus necesidades, sus aptitudes físicas y su nivel físico. Obtenga más información sobre qué decisiones tomar para tener un estilo de vida saludable.

Es importante que se realice las pruebas y los controles médicos recomendados (consulte Atención de seguimiento) para cuidar de su salud.

Hable con su equipo de atención médica para desarrollar el plan de atención de sobrevivencia que mejor se adapte a sus necesidades.

¿Está buscando más recursos de sobrevivencia?

Para obtener más información sobre la sobrevivencia, explore estos artículos relacionados. Tenga en cuenta que estos enlaces lo llevan a otras secciones de Cancer.Net:

  • Guía de sobrevivencia del cáncer de ASCO Answers: obtenga este cuadernillo de 48 páginas que ayuda a las personas con la transición a la vida después del tratamiento. Incluye formularios en blanco del resumen de tratamiento y del plan de atención de sobrevivencia. El cuadernillo gratuito está disponible en PDF, de manera que es fácil de imprimir.

  • Video educativo de Cancer.Net para pacientes: vea un video corto en inglés conducido por un experto de la American Society of Clinical Oncology que proporciona información sobre lo que viene después de finalizar el tratamiento.

  • Recursos de sobrevivencia: Cancer.Net ofrece información y recursos para ayudar a los sobrevivientes a sobrellevar situaciones e incluye secciones específicas para niños, adolescentes y adultos jóvenes y personas de más de 65 años. También hay una sección principal sobre sobrevivencia para personas de todas las edades.

La siguiente sección es Preguntas para hacerle al equipo de atención médica para ayudar a iniciar conversaciones con su equipo de atención médica. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Preguntas para hacerle al equipo de atención médica

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: encontrará algunas preguntas para hacerles a su médico o a otros integrantes del equipo de atención médica, que lo ayudarán a comprender mejor su diagnóstico, el plan de tratamiento y la atención en general. Use el menú para ver otras páginas.

Cancer.Net Mobile: Mis preguntas

Hablar con frecuencia con el equipo de atención médica es importante para tomar decisiones informadas respecto de la atención médica. Las preguntas que aquí se sugieren son un punto de partida para ayudarle a obtener más información sobre su atención y tratamiento. También se aconseja que haga preguntas adicionales que sean importantes para usted. Le recomendamos que imprima esta lista y que la lleve a su próxima cita o que descargue la aplicación móvil gratuita de Cancer.Net para obtener una lista digital y otras herramientas interactivas para manejar su atención. También puede ser útil pedir a un familiar o amigo que asista con usted a las citas para ayudarla a tomar notas.

Preguntas para hacer después de recibir un diagnóstico

  • ¿Qué tipo de tumor cerebral tengo?

  • ¿Dónde está ubicado el tumor en mi cerebro?

  • ¿Es canceroso el tumor?

  • ¿Cuál es el grado del tumor? ¿Qué significa esto?

  • ¿Me puede explicar el informe de patología (resultados de los análisis de laboratorio)?

  • ¿Un neuropatólogo experimentado revisará mis resultados de patología?

  • ¿Tiene material de lectura que me ayudaría a comprender mi enfermedad?

  • ¿Quién coordinará mi tratamiento general?

  • ¿Debo pedir una segunda opinión?

  • ¿Asiste a reuniones de expertos para analizar casos de tumores complicados?

  • ¿Existen centros de excelencia en tumores cerebrales con los que me recomiende que me ponga en contacto?

  • ¿Su consulta incluye atención multidisciplinar? ¿Qué significa esto?

  • Si me preocupa cómo afrontar los costos relacionados con la atención médica, ¿quién me puede ayudar?

  • ¿Conoce un grupo de apoyo local para personas con tumores cerebrales?

Preguntas para hacer sobre cómo elegir un plan de tratamiento y manejar los efectos secundarios

  • ¿Cuáles son mis opciones de tratamiento?

  • ¿En qué ensayos clínicos puedo participar? ¿Dónde están ubicados y cómo averiguo más sobre ellos?

  • ¿Cuántos tumores cerebrales trata cada año?

  • ¿Qué plan de tratamiento me recomienda? ¿Por qué?

  • ¿Cuál es el objetivo de cada tratamiento? ¿Consiste en eliminar el tumor, ayudarme a sentirme mejor o ambos?

  • ¿Alguna de estas opciones de tratamiento me impide participar en un ensayo clínico en el futuro?

  • ¿Cuándo debo iniciar el tratamiento?

  • ¿Quiénes integrarán mi equipo de atención médica y qué hace cada integrante?

  • ¿De qué manera este tratamiento afectará mi vida diaria? ¿Podré trabajar, hacer ejercicio y realizar mis actividades habituales?

  • ¿Este tratamiento podría afectar mi vida sexual? De ser así, ¿cómo y durante cuánto tiempo?

  • ¿Podría afectar este tratamiento mi capacidad de quedar embarazada o de tener hijos? De ser así, ¿debería hablar con un especialista en fertilidad antes del comienzo del tratamiento?

  • ¿Qué nivel de cuidado necesitaré durante el tratamiento y la recuperación?

  • ¿A quién debo llamar si tengo preguntas o problemas?

Preguntas para hacer sobre la realización de cirugía

  • ¿Qué tipo de cirugía se me realizará?

  • ¿Cuánto tiempo durará la operación?

  • ¿Cuánto tiempo estaré hospitalizado?

  • ¿Puede describir cómo será mi recuperación de la cirugía?

  • ¿Con quién debo comunicarme si experimento algún efecto secundario? ¿Qué tan pronto debo comunicarme?

  • ¿Cuáles son los posibles efectos a largo plazo de la realización de esta cirugía?

Preguntas para hacer sobre la radioterapia o las terapias con medicamentos

  • ¿Qué tipo de tratamiento se recomienda?

  • ¿Cuál es el objetivo de este tratamiento?

  • ¿Cuánto tiempo durará la administración de este tratamiento?

  • ¿Recibiré este tratamiento en un hospital o una clínica? ¿O podré recibirlo en mi hogar?

  • ¿Qué efectos secundarios puedo esperar durante el tratamiento?

  • ¿Con quién debo comunicarme si experimento algún efecto secundario? ¿Qué tan pronto debo comunicarme?

  • ¿Cuáles son los posibles efectos a largo plazo de realizar este tratamiento?

  • ¿Qué puedo hacer para aliviar los efectos secundarios?

Preguntas para hacer sobre cómo planificar la atención de seguimiento

  • ¿Cuál es la probabilidad de que el tumor reaparezca? ¿Debería prestar atención a la aparición de signos o síntomas específicos?

  • ¿Qué efectos secundarios a largo plazo o efectos tardíos son posibles en función del tratamiento que recibí?

  • Después del tratamiento, ¿qué pruebas de seguimiento necesitaré y con qué frecuencia serán necesarias esas pruebas?

  • ¿Cómo obtengo un resumen del tratamiento y el plan de atención de sobrevivencia para conservarlos en mis registros personales?

  • ¿Quién estará a cargo de mi atención de seguimiento?

  • ¿Qué servicios de apoyo de sobrevivencia hay a mi disposición? ¿Y a disposición de mi familia?

La siguiente sección de esta guía es Recursos adicionales. Ofrece más recursos adicionales en el sitio web que pueden resultarle de utilidad. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.

Tumor cerebral - Recursos adicionales

Aprobado por la Junta editorial de Cancer.Net, 09/2021

EN ESTA PÁGINA: Encontrará algunos enlaces útiles a otras áreas de Cancer.Net que proporcionan información acerca de la atención médica y los tratamientos. Esta es la última página de la Guía para los tumores cerebrales de Cancer.Net. Use el menú para regresar y ver otras páginas.

Cancer.Net incluye muchas otras secciones sobre los aspectos médicos y emocionales de un tumor cerebral, para la persona que ha recibido el diagnóstico y para sus familiares y amigos. Este sitio web pretende ser un recurso para usted y sus seres queridos desde el momento del diagnóstico, durante el tratamiento y después de este.

Se incluyen a continuación algunos enlaces para ayudarlo a explorar otras partes de Cancer.Net:

Este es el final de la Guía para los tumores cerebrales de Cancer.Net. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.