Cáncer de próstata: Factores de riesgo y prevención

Aprobado por la Junta Editorial de Cancer.Net, 12/2022

EN ESTA PÁGINA: encontrará más información sobre los factores que aumentan la probabilidad de desarrollar cáncer de próstata. Use el menú para ver otras páginas.

Un factor de riesgo es todo aquello que aumenta la probabilidad de que una persona desarrolle cáncer. Si bien los factores de riesgo a menudo influyen en la probabilidad de desarrollar cáncer, la mayoría no provoca cáncer de forma directa ni en sí mismos. Algunas personas con varios factores de riesgo conocidos nunca desarrollan cáncer, mientras que otras personas sin factores de riesgo conocidos desarrollan cáncer. Conocer los factores de riesgo y hablar con el médico al respecto puede ayudarlo a tomar decisiones más informadas sobre las opciones de estilo de vida y atención de la salud.

Los siguientes factores pueden aumentar el riesgo de que una persona desarrolle cáncer de próstata:

  • Edad. El riesgo de cáncer de próstata aumenta con la edad, especialmente después de los 50 años. Alrededor del 60 % de los casos de cáncer de próstata se diagnostican en personas de 65 años o más. Los adultos de edad avanzada que reciben un diagnóstico de cáncer de próstata pueden enfrentar desafíos únicos, especialmente en relación con el tratamiento del cáncer. Para obtener más información, visite la sección sobre envejecimiento y cáncer de Cancer.Net.

  • Raza. A los hombres de raza negra de Estados Unidos y a otros hombres de ascendencia africana se les diagnostica cáncer de próstata más que a los hombres de otras razas. Los hombres de raza negra tienen más probabilidades de morir por cáncer de próstata que los hombres de raza blanca.

  • Ubicación en Norteamérica o en el norte de Europa. El cáncer de próstata se produce con más frecuencia en América del Norte y el norte de Europa. También parece que el cáncer de próstata está aumentando entre las personas asiáticas que viven en áreas urbanizadas, como Hong Kong, Singapur, y ciudades de América del Norte y de Europa, particularmente, entre aquellos que llevan un estilo de vida con menos actividad física y una dieta menos saludable.

  • Antecedentes familiares. El cáncer de próstata que se hereda en una familia, denominado cáncer de próstata familiar, representa aproximadamente el 20 % de todos los casos de cáncer de próstata. Este tipo de cáncer de próstata se desarrolla debido a una combinación de genes compartidos y factores ambientales o del estilo de vida compartidos.

    El cáncer de próstata hereditario, que consiste en heredar el riesgo de un pariente, es raro y representa aproximadamente el 5 % de todos los casos. El cáncer de próstata hereditario se produce cuando los cambios en los genes o las mutaciones se transmiten dentro de una familia de una generación a otra. Esto se denomina mutación de la línea germinal. Si alguien tiene un pariente de primer grado (es decir, un padre/madre, hermano/hermana o hijo/hija) con cáncer de próstata, su riesgo de desarrollarlo es de 2 a 3 veces superior al riesgo promedio. Este riesgo aumenta aún más con la cantidad de parientes con diagnóstico de cáncer de próstata.

    Puede sospecharse la presencia de cáncer de próstata hereditario si los antecedentes familiares incluyen alguna de las siguientes características:

    • Tres o más parientes en primer grado con cáncer de próstata.

    • Cáncer de próstata en 3 generaciones del mismo lado de la familia.

    • 2 o más parientes cercanos, como un padre, hermano/hermana, hijo/hija, abuelo/abuela, tío o sobrino, del mismo lado de la familia diagnosticados de cáncer de próstata antes de los 55 años.

  • Síndrome de cáncer hereditario de mama y ovario (SCHMO). El SCHMO está asociado con mutaciones en la línea germinal, o hereditarias, de reparación del ADN en los genes BRCA1 y/o BRCA2. La sigla BRCA corresponde al inlgés para cáncer de mama (BReast CAncer). El SCHMO está asociado, con más frecuencia, con un mayor riesgo de cánceres de mama y de ovario en mujeres. Sin embargo, los hombres con SCHMO también tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama (en inlgés) y una forma más agresiva de cáncer de próstata. Se considera que las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 provocan solo un pequeño porcentaje de los casos de cáncer de próstata heredados. Aquellos que presentan mutaciones de los genes BRCA1 o BRCA2 deben considerar la posibilidad de realizarse exámenes de detección a una edad más joven. Los análisis genéticos pueden solo ser adecuados en el caso de las familias con cáncer de próstata que también tengan SCHMO. Si esto le preocupa en función de sus propios antecedentes familiares, consulte a un asesor genético o a un médico para obtener más información.

  • Otros cambios genéticos. Otros genes que pueden conllevar un mayor riesgo de desarrollar cáncer de próstata incluyen HPC1, HPC2, HPCX, CAPB, ATM, FANCA, HOXB13 y genes de reparación de errores de emparejamiento. Sin embargo, se ha demostrado directamente que ninguno de ellos provoca cáncer de próstata o son específicos de esta enfermedad. Se encuentran en curso investigaciones para identificar genes asociados con un mayor riesgo de cáncer de próstata, y los investigadores están constantemente obteniendo más información acerca de cómo los cambios genéticos específicos pueden influir en el desarrollo del cáncer de próstata. En la actualidad, no hay ninguna prueba genética disponible para determinar la probabilidad de que alguien desarrolle cáncer de próstata.

  • Exposición al agente naranja. El Department of Veterans Affairs (VA, Departamento de Asuntos de Veteranos) de los EE. UU. define el cáncer de próstata como una enfermedad asociada con la exposición al agente naranja, una sustancia química usada en la Guerra de Vietnam. Si usted es un veterano que puede haber estado expuesto al agente naranja, hable con su médico en el sistema de VA. Obtenga más información sobre el enlace con Agent Orange en este artículo.

  • Hábitos de alimentación y peso. Ningún estudio ha comprobado que la alimentación y la nutrición puedan causar o prevenir, en forma directa, el desarrollo del cáncer de próstata. Sin embargo, muchos estudios que analizan las relaciones entre determinadas conductas alimenticias y el cáncer indican que quizás exista un vínculo. Por ejemplo, la obesidad está asociada como muchos tipos de cáncer, incluido el cáncer de próstata; por ello, se recomienda una dieta saludable para evitar aumentar de peso (consulte “Cambios en la alimentación” más adelante).

Prevención

Diferentes factores producen distintos tipos de cáncer. Los investigadores continúan estudiando los factores que provocan el cáncer de próstata, incluidas las formas de prevenirlos. Aunque no existe una forma comprobada de prevenir por completo el cáncer de próstata, tal vez usted pueda reducir el riesgo. Hable con su equipo de atención de la salud para obtener más información sobre su riesgo personal de desarrollar cáncer.

Quimioprevención

Una clase de fármacos denominada inhibidores de la 5 alfa-reductasa (5-alpha-reductase inhibitor, 5 ARI), que incluye la dutasterida (Avodart) y la finasterida (Proscar), a menudo se usan para tratar la hipertrofia prostática benigna (HPB). Estos también pueden reducir el riesgo de desarrollar cáncer de próstata. Algunos ensayos clínicos anteriores sugirieron que los 5-ARI estaban relacionados con cánceres de próstata más agresivos, pero estudios más recientes han sugerido que esto no es cierto. De acuerdo con los resultados de un estudio de seguimiento a largo plazo que se publicó en 2013, el 78 % de las personas que tomaban finasterida o un placebo aún estaban vivos 15 años más tarde. Estos resultados sugieren que tomar finasterida no reduce el riesgo de muerte en aquellos con cáncer de próstata. La Food and Drug Administration (FDA, Administración de Alimentos y Medicamentos) de los EE. UU. no ha aprobado estos fármacos para la prevención del cáncer de próstata. Sin embargo, un 5-ARI está aprobado por la FDA para el tratamiento de los síntomas de las vías urinarias inferiores asociados con la HPB.

La decisión de tomar un 5-ARI es diferente para cada persona. Cualquier persona que considere tomar esta clase de medicamentos debe analizar los posibles beneficios y efectos secundarios con su médico.

Cambios en la alimentación

En este momento no hay suficiente información para realizar recomendaciones claras sobre el papel exacto que juegan las conductas alimenticias en el cáncer de próstata. Puede que sea necesario hacer cambios en la alimentación muchos años antes en la vida de una persona para reducir el riesgo de desarrollar cáncer de próstata más adelante.

Aquí encontrará un breve resumen de la investigación actual:

  • En algunos estudios, el consumo habitual de alimentos ricos en grasas, especialmente de origen animal, se ha asociado a un mayor riesgo de cáncer de próstata. Sin embargo, ningún estudio prospectivo ha demostrado todavía que las dietas altas en grasa animal aumenten el riesgo de cáncer de próstata. Los estudios prospectivos estudian a las personas que siguen dietas ricas en grasas o bajas en grasas y luego miden el número total de personas de cada grupo a las que se les diagnostica cáncer de próstata.

  • Una alimentación con alto contenido de verduras, frutas y legumbres, como guisantes y frijoles puede reducir el riesgo de cáncer de próstata. Se desconoce cuáles son los nutrientes directamente responsables. Aunque se ha demostrado que el licopeno, un nutriente que se encuentra en los tomates y otras verduras, está asociado con un riesgo más bajo de cáncer de próstata, los datos no han demostrado que exista una relación entre el licopeno y la prevención del cáncer.

  • Actualmente, en ensayos clínicos, se ha demostrado que ninguna vitamina, mineral ni otro suplemento específico previene el cáncer de próstata. Hable con su médico antes de tomar cualquier suplemento para prevenir el cáncer de próstata.

  • Realizar cambios específicos en las conductas alimenticias podría no detener ni reducir el desarrollo del cáncer de próstata. Es posible que dichos cambios debieran hacerse mucho antes en la vida para tener un efecto.

La siguiente sección de esta guía es Detección. Esta explica cómo las pruebas pueden detectar el cáncer antes de que los signos o síntomas aparezcan. Puede usar el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.