EN ESTA PÁGINA: encontrará una lista de pruebas, procedimientos y exploraciones frecuentes que los médicos usan para averiguar la causa de un problema médico. Use el menú para ver otras páginas.
Los médicos realizan muchas pruebas para detectar o diagnosticar un tumor neuroendocrino. También realizan pruebas para averiguar si el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo desde el lugar donde se inició. Si esto sucede, se denomina metástasis. Por ejemplo, las pruebas por imágenes pueden mostrar si el cáncer se ha diseminado. Las pruebas por imágenes muestran imágenes del interior del cuerpo. Los médicos también pueden hacer pruebas para determinar qué tratamientos podrían funcionar mejor.
En la mayoría de los tipos de tumores, una biopsia es la única manera segura para que el médico determine si un área determinada del cuerpo tiene un tumor. Durante la biopsia, el médico toma una pequeña muestra de tejido para hacerle pruebas en un laboratorio. Si no se puede realizar una biopsia, el médico puede sugerir que se lleven a cabo otras pruebas que ayuden a establecer un diagnóstico.
Cómo se diagnostican los tumores neuroendocrinos
Hay muchas pruebas que se usan para diagnosticar un tumor neuroendocrino. No todas las pruebas enumeradas a continuación se utilizarán para todas las personas. Su médico puede considerar estos factores al elegir una prueba de diagnóstico:
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El tipo de tumor neuroendocrino que se sospecha
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Sus signos y síntomas
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Su edad y estado de salud general
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Los resultados de pruebas médicas anteriores
La mayoría de los tumores neuroendocrinos se detectan inesperadamente cuando una persona se realiza una radiografía o un procedimiento médico por motivos no relacionados con el tumor. Si un médico sospecha de un tumor neuroendocrino, solicitará los antecedentes médicos y familiares completos y realizará un examen físico exhaustivo. Además, se pueden utilizar las siguientes pruebas para diagnosticar un tumor neuroendocrino:
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Biopsia. Una biopsia es la extirpación de una pequeña cantidad de tejido para examinarlo bajo un microscopio y se requiere para hacer un diagnóstico de tumor neuroendocrino. Un patólogo analiza las muestras que se extirparon durante la biopsia. Un patólogo es un médico que se especializa en interpretar pruebas de laboratorio y evaluar células, tejidos y órganos para diagnosticar enfermedades. Cabe destacar que no se debe realizar una biopsia en los tumores que se sospecha que pueden ser un feocromocitoma, a menos que sea absolutamente necesario para confirmar el diagnóstico. Una biopsia de estos tumores puede ser potencialmente mortal. Consulte la sección Feocromocitoma y paraganglioma (en inglés) para obtener más información sobre este tipo de tumor neuroendocrino.
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Análisis de sangre/orina. El médico puede necesitar muestras de sangre y orina para controlar los niveles anormales de hormonas y otras sustancias. Los análisis de orina comprueban la cantidad de 5-HIAA, un producto de degradación de la serotonina, que generan algunos tumores neuroendocrinos. También pueden obtenerse mediciones de los niveles de serotonina en sangre; sin embargo, estas son menos confiables debido a las fluctuaciones. Después del diagnóstico, a veces también se realiza un análisis de sangre para medir la cromogranina A, una proteína producida por las células tumorales, para observar la respuesta del tumor al tratamiento. La cromogranina A es un marcador tumoral y no es una hormona; no forma parte de las pruebas de diagnóstico.
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Pruebas de biomarcadores tumorales. Su médico puede recomendar realizar pruebas de laboratorio para identificar los genes, proteínas y otros factores específicos del tumor. Esto también se puede llamar prueba molecular del tumor. Los resultados de estas pruebas ayudarán a decidir sus opciones de tratamiento. Esto es menos útil en los tumores neuroendocrinos que en otros tipos de cáncer.
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Endoscopia. Una endoscopia le permite al médico ver el interior del cuerpo mediante un tubo flexible, delgado e iluminado denominado endoscopio. Hay muchos tipos diferentes de endoscopias, que incluyen la endoscopia superior (en inglés) para examinar el esófago y el estómago y la colonoscopia para examinar el recto y el colon. La persona puede estar sedada mientras el tubo se inserta cuidadosamente en el cuerpo. La sedación consiste en administrar medicamentos que provoquen sensación de mayor relajación, tranquilidad o somnolencia. Si se detecta una anomalía, se realizará una biopsia (consulte más arriba).
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Ecografía. Una ecografía utiliza ondas de sonido para crear una imagen de los órganos internos. Los tumores generan ecos de las ondas de sonido que son diferentes de los producidos por el tejido normal. Esto significa que cuando las ondas rebotan en la computadora, se crean imágenes y el médico puede localizar una masa dentro del cuerpo. Existen diferentes tipos de ecografías para examinar diferentes partes del cuerpo. En algunos casos, puede realizarse una biopsia durante el procedimiento.
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Radiografía. Una radiografía es un modo de crear una imagen de las estructuras internas del cuerpo usando una pequeña cantidad de radiación. A veces, un tumor neuroendocrino podría no aparecer en una radiografía debido a su tamaño o ubicación, de modo que el médico también puede recomendarle otros tipos de pruebas de diagnóstico por imágenes. Si el médico sospecha de un tumor neuroendocrino del tracto GI (en inglés), es posible que se realice una radiografía de bario. El paciente ingiere un líquido que contiene bario, que impregna las paredes del esófago, el estómago y los intestinos. Luego se toma una serie de radiografías.
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Exploración por tomografía computarizada (TC). Una exploración por TC genera imágenes del interior del cuerpo utilizando rayos X, que se toman desde diferentes ángulos. Una computadora combina estas imágenes en una imagen tridimensional detallada que muestra las anomalías o los tumores. Una exploración por TC se puede utilizar para medir el tamaño del tumor. Además, una exploración por TC se usa para ver si un tumor se ha diseminado al hígado. En ocasiones, antes de la exploración se administra un tinte especial, denominado medio de contraste, a fin de obtener mejores detalles en la imagen. Este tinte se puede inyectar en una vena del paciente o puede administrarse en forma de pastilla o líquido para tragar.
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Resonancia magnética (RM). Una RM utiliza campos magnéticos, en lugar de rayos X, para producir imágenes detalladas del cuerpo. Se puede usar la RM para medir el tamaño del tumor. Antes de la exploración, se administra un tinte especial denominado medio de contraste a fin de crear una imagen más clara. Este tinte se puede inyectar en una vena del paciente o puede administrarse en forma de pastilla o líquido para tragar.
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Examen por imágenes de medicina nuclear. Durante esta prueba, se inyecta una pequeña cantidad de un fármaco radiactivo, llamado marcador, en una vena del paciente. A continuación, el cuerpo se escanea para mostrar dónde se ha acumulado la radiactividad en el cuerpo. Sin embargo, la cantidad de sustancia radioactiva es demasiado baja para ser dañina. Las tomografías por emisión de positrones (TEP-TC) son el tipo de imagen que se usa para los tumores neuroendocrinos. Una exploración por TEP se combina con una exploración por TC (ver arriba), llamada exploración por TEP o TEP-TC. Se usan 3 tipos de marcadores en una exploración por TEP: galio-68 (68Ga) DOTATATE, cobre-64 (64Cu) DOTATATE, y (18F) fluorodesoxiglucosa (FDG).
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El 68Ga DOTATATE en PET y el 64Cu DOTATATE en PET constituyen formas de obtención de imágenes del receptor de somatostatina y se utilizan principalmente para observar los tumores neuroendocrinos de páncreas de crecimiento lento (grados 1 y 2, véase Grados). Los receptores de somatostatina son proteínas presentes en la superficie de una célula de tumor neuroendocrino que actúan como diana para estos agentes de obtención de imágenes. Cuando el 68Ga o el 64Cu se unen al receptor de somatostatina y se toma una imagen, los puntos del cáncer brillan como bombillas. El barrido de 68Ga DOTATATE en PET ha sustituido a un método de diagnóstico por imágenes nuclear diferente conocido como OctreoScan porque es más eficaz. Un 64Cu DOTATATE en PET es lo último en trazadores que se pone a disposición para localizar un tumor neuroendocrino.
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El barrido de 18F FDG en PET es otro tipo de barrido de PET pero no usa el receptor de somatostatina. En ocasiones, se lo usa para los tumores neuroendocrinos de crecimiento más rápido (grado 3).
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Después de que se realicen las pruebas de diagnóstico, el médico revisará los resultados con usted. Si se diagnostica un tumor neuroendocrino, estos resultados también ayudarán a que el médico describa el tumor. Esto se denomina determinación del estadio.
La siguiente sección de esta guía es Estadios. Explica el sistema que los médicos usan para describir el alcance de la enfermedad. Use el menú para elegir una sección diferente para leer en esta guía.